En adición a lo que le compartí la semana pasada acerca de entrenar nuevas habilidades y “ejercitar” músculos intelectuales, tomar decisiones es un elemento crucial en los negocios y en la vida en general. Mientras que para unos es un proceso natural que no implica mayor dificultad más allá de tener información suficiente y saber con claridad el impacto de lo que implica esa decisión, para otros llega a ser algo paralizante, que los desafía emocionalmente y para aquellos que gozan de tener el control de las cosas, es incluso incómodo.
Decidir es un privilegio con el que no siempre contamos, pues como le he descrito en este espacio, la industria agrícola ofrece escenarios muy complejos donde poco hay para elegir cuando no hay agua para sembrar; nada que poner en la balanza cuando una tromba destruye una carretera y evita el traslado de una cosecha hacia su destino final y ni qué decir ante la volatilidad en los precios internacionales de los granos, por citar algunos ejemplos.
Cuando la fortuna toca a nuestra puerta y los resultados dependen en gran medida de lo que vamos a decidir, entonces ahí aparece el costo de oportunidad, concepto que resume la plataforma Shopify como el valor del camino no elegido. Hoy no lo inundaré de fórmulas para su cálculo, sino los impactos probables de lo que implica dejar ir una oportunidad o tomar una decisión fuera de tiempo con la óptica del Marketing Agrícola.
El (alto) costo de los insumos baratos: Una de las 40 decisiones que debe tomar el agricultor durante un ciclo agrícola está ligado con la selección de sus insumos, como la semilla, el fertilizante, los agroquímicos, entre otros. En la visión de corto plazo (que no por ello es menos importante), el precio de estos productos pueden ser el detonante de elección, pero cuando las plagas hacen su aparición, el clima se complica o no se cuenta con todas las herramientas para respaldar el crecimiento de un cultivo, esa decisión que les llevó a ahorrar una determinada cifra, puede hacerlo perder miles de pesos.
Lección del surco: las decisiones necesitan ser evaluadas con los lentes de un impacto futuro, pues el corto plazo es un silencioso enemigo que ensombrece el juicio.
El costo de no pagar asesoría: No tengo pruebas pero tampoco dudas de que nuestro México es el país #1 de la cultura de “eso yo lo puedo hacer sin ayuda”. A veces damos por sentado que los asesores cumplen un papel de acompañamiento relativo en la implementación de una técnica de siembra, un sistema de riego o en el mercadeo de una cosecha y nada más falso de que eso. Por años, he tenido la fortuna de ver con qué disciplina los asesores en el campo se preparan para estar listos ante los más altos requerimientos que los agricultores tienen y a veces pensamos que ese servicio no tiene costo y le puedo decir (con pruebas y sin dudas) que a veces el servicio está por encima de los productos.
Lección del surco: Le aseguro que ha perdido tiempo y dinero cuando ha optado por no recibir un servicio complementario por creer que usted lo podría hacer. Deje en manos de los expertos que saben hacer muy bien lo que usted cree que hará muy bien.
El costo de la probabilidad: Le conté alguna vez en este espacio que cuando fenómenos meteorológicos impactan localidades agrícolas, en lugar de contratar un seguro de daños inmediatamente, los agricultores y ganaderos (no todos, por supuesto) suelen aplicar la falsa estadística de “como eso no pasaba desde hace 50 años y hoy sucedió, pues toca esperar otros 50 años, así que no hay riesgo”.
Le puede parecer casi una broma pero pensar que lo no controlable se va a volver predecible, es un altísimo costo que pone las probabilidades totalmente en nuestra contra.
Lección del surco: ¿Usted elegiría la escuela de sus hijos con base en su deseo de que sea una buena institución o porque la fachada está bonita u optaría por investigar acerca del plan de estudios? Suena ilógico, pero operar así es tan irresponsable como común.
SEMBRANDO REFLEXIÓN
Cuando éramos niños, cambiarle a cualquiera de los 4 canales disponibles, no requería mucha ciencia y hoy al ver las plataformas de streaming, concluir que “no hay nada que ver” con más de 1,000 películas disponibles al instante, es igualmente ilógico que el miedo a decidir porque si bien las emociones juegan un papel relevante, hoy contamos con muchas alternativas en cualquier ámbito, mismas que tienden a FACILITAR nuestro proceso de decisión.
Calcule el costo de oportunidad pero no le dé la espalda a la fortuna que tiene de intervenir, pues no siempre será así, ni en el campo, ni en su industria.
Me encantará escuchar lo que piensa al respecto así que no deje de compartir este contenido y comentarlo. Hasta la semana próxima.