Los mexicanos somos por naturaleza solidarios, que no se nos olvide. A quién nos tocó vivir el lamentable terremoto de México en 1985, fuimos testigos de la mayor muestra de solidaridad de los mexicanos hacia los mexicanos. La ayuda voluntaria se desbordó a tan solo unos minutos después de las 07:19 A.M. de aquel 19 de septiembre; ante la magnitud de la tragedia la ayuda de la sociedad civil dio aliento a un pueblo azotado por la tragedia. La solidaridad de la población civil se despertó esa mañana, de forma espontánea se sumaron miles de personas para brindar su apoyo, con lo único que tenían: sus manos. La misión: ayudar a rescatar al mayor número de sobrevivientes que permanecían sepultados entre los escombros, algunos días después, ya organizados y con maquinaria se logró rescatar a muchas personas de aquella tragedia.
Recuerdo esto a tan solo unos días de que se cumplan 31 años de aquel terremoto. De aquella tragedia se escribió mucho, se generaron miles de noticas de tan lamentable acontecimiento, incluso muchos años después. En una de ellas, leí una frase que se me quedó muy grabada: –“La movilización social fue muy fuerte, la sociedad no esperó a que el gobierno le resolviera sus problemas. Se logró una fraternidad entre gente distinta de todas las generaciones. La fiesta también era una forma de luchar y la gente mejor se ponía a cantar para no llorar”– Jesús Ramírez Cuevas.
Si partimos de la base que la mercadotecnia social tiene su origen en fomentar la solidaridad en la sociedad civil y lograr influir en las personas para generar un cambio positivo del comportamiento y motivar el sentido voluntario de las personas, es un gran motor social para las empresas.
Por tanto, en México, en nuestra sociedad civil, contamos con ese gran espíritu de solidaridad, lo llevamos en la sangre, sólo que en muchas ocasiones regresa a ese sueño profundo de la inacción. Pero sin duda, ese espíritu, es el campo fértil para que la mercadotecnia social genere los proyectos e iniciativas que muevan a la sociedad civil a volcar su ayuda y que todos los días vemos a lo largo de nuestro querido México.
Un ejemplo en donde las instituciones y la sociedad civil se unen en solidaridad, está en este video que les quiero compartir, sucedió el jueves 10 de marzo de 2016 en el zócalo de la CDMX para arriar la monumental bandera nacional, se hizo viral en las redes sociales.
“Las manos de los militares y civiles se unieron, trabajando juntos para un mismo objetivo: cuidar a México”
Conmovedor y esperanzador, así es como defino este pequeño hecho que muestra nuevamente el espíritu espontáneo de ayuda de la sociedad civil. Haciendo una similitud, con nuestra profesión como mercadologos, tenemos ese campo fértil para nuestros proyectos, desarrollar estrategias, iniciativas que muevan, despierten esa solidaridad, ese es nuestro gran reto. Una de las premisas fundamentales que equilibran la estrategia del marketing social son:
– Los intereses de la sociedad: podemos identificar la problemática social a la cual nos queremos enfocar y en donde podemos organizar a la sociedad civil para lograr nuestro objetivo: ¡ayudar a los demás!
Termino con esta idea con la cual los invito, en este día que se conmemora la Independencia de nuestro país, además de decir: ¡Viva México! también decir: ¡Ayudo a México!, felices fiestas patrias.