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Muchas empresas de la economía colaborativa no han logrado entregar buenos resultados en la bolsa desde su debut, incluyendo a Deliveroo
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Lo anterior, en parte porque el modelo de negocio de muchas de estas marcas no ha logrado todavía generar ingresos para los inversionistas
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Hay excepciones notables a esta regla, como Airbnb que también tuvo su IPO recientemente y probó ser un éxito en la bolsa
La plataforma de delivery europea en la que Amazon ha invertido mucho dinero, Deliveroo, por fin llegó al mercado de valores a través de la bolsa de Londres. Pero de acuerdo con Reuters, a solo unas horas de su Oferta Pública Inicial (IPO), el valor de sus acciones ya se desplomó en más del 30 por ciento. La cifra representa más de dos mil 280 millones de libras esterlinas, unos tres mil 150 millones de dólares (mdd) de capitalización perdidos en el trecho de salida.
Desde el pitazo de salida que Deliveroo estaba claramente perfilándose para un debut no muy positivo. La agencia de noticias señala que, con 390 peniques por acción, la valuación inicial de la plataforma de delivery fue del equivalente a unos 10 mil 460 mdd. Esta cifra está en las estimaciones más bajas que se esperaban para la IPO. Y solo unos minutos después, ya había perdido casi una tercera parte. En su punto más bajo, sus títulos valían apenas 271 peniques.
Reuters apunta que la IPO de Deliveroo fue presumida por las autoridades de Reino Unido como una “verdadera historia de éxito británica en tech”. Sin embargo, varias empresas de inversión, desde antes del debut, habían decidido ignorar las acciones de la empresa. Esto, a raíz de varias preocupaciones sobre la estabilidad de la economía colaborativa. Expertos que entrevistó la agencia apuntan que éste será el último debut “del viejo mundo de la COVID-19”.
Crónica de un terrible debut anunciado
No es del todo sorprendente que la salida a la bolsa de Deliveroo esté siendo tan mal recibido por los mercados. Y no solo porque las grandes compañías de inversión decidieron que no iban a formar parte de la IPO. Ya se habían dado varios fenómenos que no pintaban muy bien a la plataforma. A inicios de marzo, según Sky News, la plataforma presumió un crecimiento notable en medio de la pandemia. Aún así, reveló una pérdida de 307.66 mdd anuales en 2020.
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También, como ya se dijo, la controversia en torno a la economía colaborativa habría tenido un papel crucial en el pésimo debut de Deliveroo. De acuerdo con BBC, varios fondos y empresas de inversión estaban empezando a tomarse más en serio los temas de Responsabilidad Social Corporativa (CSR). Algo en lo que la plataforma de delivery está técnicamente reprobada, pues no ofrece a sus colaboradores ni un pago mínimo, prima vacacional o días de enfermedad.
La misma Deliveroo parecía estar consciente, en parte, de que su debut no iba a ser tan bueno como esperaba. De acuerdo con PYMNTS, previo a su IPO, la marca redujo el rango de precio que esperaba para su salida a la bolsa. Si bien se mantuvo siempre los 390 peniques por título como el rango más bajo esperado, en el extremo más alto se tenía una valuación de 460 por unidad. Una cifra que se recortó en 11 por ciento tan solo hace un par de días, previo al debut.
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Se repite la historia de Uber con Deliveroo
Es difícil no extender paralelos entre la plataforma de delivery europea y la líder del mercado a escala global, Uber. En 2019, la app de taxis compartidos se lanzó al mercado y tuvo una IPO que inmediatamente se convirtió en un descalabro. No solo eso, sino que las pérdidas masivas continuaron por varios días después. Algo que probablemente se podrá repetir para el caso de Deliveroo. Algo lamentable para una empresa que antes tenía muchísima promesa en el sector.
Hay que recordar que, tan solo en agosto pasado, se dio a conocer que las autoridades de Reino Unido dieron el visto bueno a Amazon para invertir en Deliveroo. Esta transacción se había hecho desde mayo del 2019, pero estaba pendiente de aprobación por temas de competencia. Una vez permitida la operación, se le confirió a la plataforma de Bezos el 16 por ciento de la app de delivery. Algo que, en su momento, se vió como un triunfo para la retailer.
