Internacional.- ¿La publicidad sexista no se va a extinguir nunca? Hay actores del mundo del marketing que parece que no han entendido nada y siguen “vendiendo” productos y servicios usando a la mujer como objeto.
Un ejemplo de ese tipo de prácticas es lo que sucedió en Cardiff, la capital de Gales, donde una serie de vallas publicitarias recorren la ciudad promocionando el gimnasio Ufit Fitness de una manera muy particular.
This @ufit_fitness sign is causing an uproar online. https://t.co/MKmZ7Mblk3 pic.twitter.com/cFGtZg7BCS
— HARDBODY (@hardbodynews) 7 de octubre de 2016
En efecto, una acción de street marketing que está siendo muy criticada en las redes sociales incluye una imagen de una mujer enfocada desde atrás mientras realiza actividad física en una bicicleta de spinning y un mensaje que habla que hay mejores cosas que atrapar que el carro de adelante, dice Mashable.
El anuncio ha provocado una reacción masiva de los medios sociales después de que la gente acusara a los autores de sexismo y de objetivación de la mujer, publicó Huffington Post.
Oh fuck off @ufit_fitness. Where to begin with this? Women don’t go to the gym to be perved on and treated as a sex object by men. pic.twitter.com/fR3D4itIM3
— Kayleigh Bell (@_kayleighbell) 5 de octubre de 2016
El mensaje es particularmente polémico por el gym que lo promueve está presente en la maratón Cardiff Half 2016, organizada por la prestigiosa universidad local.
Las críticas hablan de “sexualizar vergonzosamente las mujeres en este anuncio” y “de contenido totalmente inadecuado”. Otros dicen: “Bien hecho @ufit_fitness. Hacen que una enorme cantidad de mujeres no quieran ir a su gimnasio, y hombres también” y “acabamos de ver este anuncio obsceno de @ufit_fitness donde tengo una membresía anual. Probablemente la vaya a cancelar #sexist #outrageous”.
Gimnasios, siempre ellos
Los gimnasios son propensos a este tipo de anuncios. El gimnasio Fit Factory de la localidad malagueña de Ronda estuvo el año pasado en la mira de todos al ser denunciado por publicidad machista.
El motivo fue un cartel el que podía leerse “Sé solo fea”, junto a una figura de una mujer en buena forma y sin cara.