Las redes sociales como Facebook deben bloquear de forma proactiva los contenidos que incitan al odio así como evitar campañas en internet dirigidas contra minorías, como las emprendidas en Myanmar, señaló este miércoles el jefe de derechos humanos de Naciones Unidas.
De acuerdo con Reuters, Zeid Ra’ad al-Hussein, alto comisionado del organismo para los Derechos, habló después de que expertos en la ONU acusaran a los generales de Myanmar de “Intención genocida”, además de que señaló que Facebook había permitido que su plataforma se usara para incitar a la violencia en contra de los rohinyá.
A principios de semana, la plataforma digital de Mark Zuckerberg indicó que retiró las cuentas de varios militares de alto rango de Myanmar así como de sus cuentas de Instagram para evitar la propagación de “odio y desinformación” después de revisar sus contenidos.
Según la agencia, Zeid, cuyo portavoz indicó que se había reunido durante los últimos meses con importantes compañías de Silicon Valley, incluidad Facebook y Google, estaba hablando en una de sus últimas conferencias de prensa, que sentía que Facebook no se tomó el asunto en serio en un principio, pero que la actitud de la compañía comenzó a cambiar después de que Yanghee Lee, informador especial de la ONU sobre derechos humanos en Myanmar, declarara que la red social era utilizada en dicho país para difundir discursos de odio.
“Pero no debería ser porque la prensa o la comunidad de derechos humanos les señala el problema para que luego respondan de repente. Deben ser conscientes de ello con anticipación”, sostuvo Zeid. “Así que no creo que deban esperar hasta que comience la crisis. Deberían pensar de manera proactiva sobre qué medidas tomarán para mitigar eso”, añadió.
Dentro del reporte de la agencia, se precisó que el lunes Facebook reconoció que si bien fueron demasiado lentos para actuar en el caso Myanmar, ahora estaba avanzando con una mejor tecnología para identificar discursos de odio.
A pesar de ello, el comisionado indicó que existe el peligro de que las redes sociales pudieran estar excesivamente regulada de una manera que viola las leyes de derechos humanos, incluido el de la libertad de expresión. Los gigantes de la tecnología deberían “mantener el espacio más amplio disponible y abierto al ejercicio de la libertad de expresión”.