La Organización Mundial del Comercio (OMC) pronosticó este jueves un crecimiento económico global continuo para este año; sin embargo, emitió una advertencia sobre las medidas comerciales restrictivas entre Estados Unidos y China y la provocación de un posible “efecto domino” en la economía mundial.
El organismo presentó en Ginebra, Suiza, un informe de predicciones sobre la economía global para 2018 y 2019, así como los riesgos que podrían afectar a la actual recuperación económica internacional.
El director general de la OMC, Roberto Azevedo, destacó que el comercio mundial crecerá 4.4 por ciento este año y al menos 4.4 por ciento en 2019, manteniendo una recuperación rápida generada durante 2017.
“La perspectiva que estamos publicando hoy es bastante positiva. Refleja el crecimiento económico más sólido que hemos visto tanto en los países desarrollados como en desarrollo, y que se prevé que continúe. Pero permítanme ser claro, estos pronósticos no tienen en cuenta la posibilidad de una escalada dramática en las restricciones comerciales”, indicó el funcionario
El titular de la OMC destacó que el progreso podría verse rápidamente socavado si los gobiernos recurren a políticas comerciales restrictivas, “especialmente en un proceso de golpe por golpe”, haciendo referencia a las tensiones comerciales entre China y Estados Unidos.
En las últimas semanas, los gobiernos de China y Estados Unidos se han amenazado mutuamente con aranceles de decenas de miles de millones de dólares en sus exportaciones, lo que genera temores de que participen en una guerra comercial a gran escala que podría dañar el crecimiento mundial y afectar los mercados.
El organismo advierte que los “signos ampliamente positivos” en el comercio mundial enfrentan en la actualidad vientos en contra por “una oleada creciente de sentimiento antimonopolio y la mayor voluntad de los gobiernos de emplear medidas comerciales restrictivas”.
Es probable, agregó, que la política monetaria se vuelva menos expansiva y las condiciones financieras se vuelvan más estrictas. “Esto podría generar cierta volatilidad en los mercados y los flujos de capital”, advirtió.
Explicó que aun cuando la posibilidad de una mayor escalada sigue siendo hipotética, por ahora, no obstante, es una realidad que amenaza la posibilidad de una “escalada dramática” de restricciones comerciales globales.
“Un ciclo de represalias es lo último que necesita la economía mundial. Los problemas comerciales apremiantes que enfrentan los miembros de la OMC se abordan mejor a través de la acción colectiva. Insto a los gobiernos a mostrar moderación y resolver sus diferencias a través del diálogo y el compromiso serio”, apuntó.
Azevedo recordó que la OMC se creó como un foro para que los miembros se responsabilicen mutuamente de sus prácticas comerciales, lo cual, resaltó, lo han estado haciendo de manera efectiva durante muchos años.
“Debemos salvaguardar el fuerte crecimiento comercial que estamos viendo hoy, y asegurarnos de que el comercio siga siendo un motor para el crecimiento económico, la creación de empleo y el desarrollo en todo el mundo. Gracias”, concluyó.