El Cabildeo Político data de 1830, cuando en la cámara de los comunes del Parlamento Inglés, los ciudadanos de la época llenaban los pasillos del mítico edificio en donde está el Big Ben, situado a un costado del Río Támesis, que solicitaban una audiencia con los parlamentarios de ambos partidos para buscar una rápida solución de sus necesidades y problemas.
Nace así el Lobbying para el mundo que hoy representa una poderosa herramienta para la esfera política.
El cabildeo es la actividad que busca influir en las decisiones de las autoridades públicas o privadas en favor de intereses específicos. En sí, se trata de un aliado de la comunicación que se lleva a cabo a través de un proceso planificado de intercambio de información con los poderes públicos, pero también se desarrolla entre los diferentes estadistas del mundo que desean plantear sus políticas públicas.
Cada uno de los gobernantes tiene un estilo único para negociar y comunicarse; en consecuencia, tenemos a aquellos que utilizan las amenazas y las descalificaciones para imponer sus posturas y a otros, que siguen el Manual Diplomático y el de Carreño, para hacerse escuchar de manera razonada.
Para analizar un caso reciente, revisemos la forma de negociar de Donald Trump que inició hace tres meses difundiendo sus presiones para imponer aranceles a México y a Canadá, acción que puso a reflexionar a Sheinbaum y a Trudeau, sobre las tácticas que deberían utilizar para frenar la migración y el tráfico de fentanilo para así evitar la imposición tributaria. Trump en este episodio presiona fuerte para lograr el mejor acuerdo para su gobierno pero lo hace con fuertes señalamientos sobre el tema como el de que -¨Sería mejor que Canadá y México formaron parte de la Unión Americana¨- , declaración que puso a responder de manera innecesaria a sus dos socios comerciales ante los medios de comunicación de sus países para declarar que ambos países son soberanos.
Con lo anterior, Trump inicia una narrativa que no parece una buena broma.
Otros gobernantes como Vladimir Putin negocian fuerte para terminar la guerra pero ya con el trofeo de Ucrania en sus manos. Javier Milei, cabildea con Washington y el Fondo Monetario Internacional, para obtener recursos adicionales y sacar de una vez por todas a la Argentina de su crisis económica.
Lula Da Silva, el presidente Brasileño trabaja para seguir fortaleciendo su agenda del Foro de Sâo Paulo que integra a movimientos y gobiernos de izquierda con la idea de balancear lo que el ala derecha opera en el mundo.
El G-7 el grupo de los países más desarrollados del mundo trabaja para reforzar los sistemas alimentarios sostenibles, así como impulsar más iniciativas en ciencia o innovación para la mitigación y adaptación al cambio climático. Finalmente, Joe Biden, el aún Presidente Americano, intenta que su aliado Benjamín Netanyahu, el Premier Israelí, frene los bombardeos hacia Siria e Irán.
Esperemos que durante estos últimos días del 2024, se imponga la razón por sobre las presiones de algunos políticos que buscan más la desestabilización que el acuerdo GANAR- GANAR.
Feliz Navidad estimados amigos lectores de Merca2.0
Nos encontraremos más adelante.
Federico Torres López.