Reino Unido.- Un chico se ha propuesto multar a los pilotos…por buena conducta. Extraño, pero sorprendente para las “víctimas” de este experimento social. ¿Quieres saber de qué se trata?
Imagina que te estacionas en el lugar correcto, a la hora correcta y llega alguien a ponerte una multa sobre el parabrisas. La indignación se te sube a la cabeza y las ganas de decirle al chico unas cuantas cosas no se hacen esperar. Luego y cuando abres el sobre con la multa, tu molestia se vuelve sonrisa.
Insólito y divertido. Me pregunto si lo bueno del final de la historia logra paliar la molestia inicial, pero como en todas partes estamos enfrentados a riñas y altercados diarios, la “buena acción” es un oasis.
Un experimento así nos hace pensar en el efecto “esto no es lo que parece”, que siempre da buenos resultados.
El mensaje final, suena a comercial de bebida cola “¿Qué tal si tú sales y le alegras la vida a alguien?” pero no es mala. Probablemente si la viralizamos, algo logremos.
Y tú ¿Harías algo así, en forma personal o como campaña para tu producto?