La ciencia de los materiales es una de las industrias más prometedoras del futuro y sin duda, la de los productos para el reciclaje tiene un componente bastante virgen por explorar, en donde no sólo los plásticos, el papel y los metales son susceptibles, también los textiles.
Tal es el caso, que la empresa fundada por el australiano Daniel McLaughlin, se dio a la tarea de experimentar con lana vieja para crear un material llamado Biowool, con el cual está en la creación de maletas de un aspecto bastante estético.
Luego de estudiar en el Royal College of Arts en el Reino Unido, McLaughlin desarrolló Biowool mediante el estudio de la industria de la lana de su país y así, a partir de la combinación de lana con bio-resinas consiguió un material increíblemente fuerte, totalmente renovable y al final de su vida es biodegradables.
El análisis hecho por el ingeniero, observó que cerca del 7% del pelo de oveja con el que se fabrica la lana se tira a la basura, porque no logra la calidad suficiente, así que el nuevo material está formado a partir de esa lana y de una resina sintética del aceite de canola. Las fibras para la fabricación del BioWool también pueden venir de diferentes textiles, como alfombras o tapetes.