Los datos del primer trimestre de 2018 son alarmantes: cuando aún falta el número oficial de marzo (será publicado el jueves 12 de abril), los cálculos indican que la inflación estará entre el 7 y el 8 por ciento en Argentina en los primeros tres meses del año. En enero fue 2,33% y en febrero 2,48% (IPC Córdoba).
Esto se acumulará con el 25% que subieron en promedio los precios en 2017, el casi 35% que treparon en 2016 y el 28% de 2015.
Todo indicaba que 2018 no iba a ser tan “caliente” en materia de inflación. Que bajara 10 puntos porcentuales en un año era un buen augurio. Sin embargo, todo se comenzó a complicar a fines de 2017, cuando las autoridades monetarias del país que gobierna Mauricio Macri cambiaron las metas de inflación para este año: las elevaron del 10 al 15 por ciento.
Esto alteró el mercado. En paralelo, aumentó el dólar y los precios de los alimentos empezaron a subir al mismo ritmo que lo hacían a comienzos de 2017.
Es por esto que los analistas ya esperan que la inflación sea mayor a 20 por ciento este año, lo que contrasta con el pedido de los empresarios y la exigencia del Gobierno de que los salarios no se indexen más de 15 puntos porcentuales.
Este miércoles, el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) que elabora el Banco Central (BCRA) volvió a reflejar una suba en las expectativas de inflación. Los pronósticos se dan pese a los últimos esfuerzos de esa entidad de intervenir en el mercado de cambio tratando de sostener la suba del dólar.
Según el REM de marzo, para este año la inflación proyectada, el nivel general, subió a 20,3% interanual, 0,4 puntos porcentuales más que lo calculado en el relevamiento previo.
Algo grave es que hubo un incremento en la llamada “inflación núcleo” esperada para este año. Esta es la inflación que no tiene en cuenta los precios de las tarifas de los servicios regulados. Este dato aumentó un punto porcentual, a 18,1% interanual.
Con la intervención del Estado, el dólar se mantiene en los 20,41 pesos argentinos por unidad en el terreno mayorista. Para el REM, el promedio mensual esperado para los próximos seis meses lo ubican entre 20,40 y 21,60 pesos. Para diciembre: 22,50 pesos por dólar.
Gasolinazo imparable
Una de las muestras más evidentes del fracaso para contener la inflación es el incremento de los combustibles. En 2017, la gasolina y el diésel treparon 34 por ciento y en lo que va del año, 14 puntos porcentuales.
Este jueves, el incremento fue de entre el 4 y el 6 por ciento según el tipo de producto: aumentaron más los llamados premium, de mayor octanaje.
Volvió a aumentar el precio de la nafta https://t.co/T2oKt6pBG7 pic.twitter.com/gm89iwOjr5
— TN – Todo Noticias (@todonoticias) 5 de abril de 2018