Lo que antes se lograba mediante mĆtines, pancartas y spots en televisiĆ³n, hoy se complementa (y a menudo se supera) con publicaciones en plataformas como Facebook, Twitter, Instagram y TikTok. La inmediatez, el alcance y la posibilidad de segmentar audiencias de forma precisa han convertido a las redes sociales en herramientas poderosas para influir en el voto.
Las redes sociales permiten a los candidatos (y a sus equipos extendidos de comunicaciĆ³n) comunicarse directamente con los votantes, pero tambiĆ©n permiten una segmentaciĆ³n precisa de los mensajes de acuerdo a datos demogrĆ”ficos e intereses. Esto permite a los polĆticos dirigirse a grupos especĆficos de votantes con mensajes adaptados a sus valores y preocupaciones.
En tĆ©rminos de datos, informaciĆ³n de Stadista estima que la inversiĆ³n en publicidad digital para campaƱas electorales en Estados Unidos superarĆ” los 2.64 millones de dĆ³lares a finales de 2024 , lo que resalta la importancia creciente de estas plataformas en la polĆtica moderna. AdemĆ”s, el estudio anual de DataReportal, We Are Social y Meltwater sobre canales digitales, reportĆ³ que para 2024, el 66.2% de la poblaciĆ³n mundial tiene acceso a internet,Ā y cerca del 63.2% utiliza redes sociales , lo que convierte a estas plataformas en un escenario clave para cualquier estrategia electoral.
La polarizaciĆ³n en la era digital
El impacto de las redes sociales en las elecciones estadounidenses es innegable, especialmente desde la elecciĆ³n de 2016, cuando Donald Trump aprovechĆ³ Twitter (ahora X) como su principal plataforma de comunicaciĆ³n directa con los ciudadanos. SegĆŗn el Pew Research Center, durante 2024 la experiencia del electorado estadounidense con la polĆtica en redes sociales ha dependido de la plataforma que utilicen, desde TikTok hasta X.
Por otro lado, no todo ha sido positivo. Plataformas como Facebook fueron objeto de escrutinio por la difusiĆ³n de noticias falsas y desinformaciĆ³n, lo que ha escalado a un debate sobre la regulaciĆ³n de las plataformas sociales y su impacto en la vida real. La polarizaciĆ³n polĆtica, alimentada en parte por el algoritmo de las redes sociales que prioriza contenido sensacionalista, es uno de los grandes desafĆos que enfrentan los electores alrededor del mundo.
Sin embargo, las redes sociales han permitido una mayor movilizaciĆ³n ciudadana. En 2020, movimientos como Black Lives Matter utilizaron plataformas como Instagram y Twitter para organizar protestas y generar conciencia sobre la importancia del voto, especialmente entre las comunidades afroamericanas y latinas.
āA medida que la poblaciĆ³n con acceso a internet y redes sociales crece, y los votantes nos enfrentamos a nuevas elecciones, el rol de las plataformas serĆ” clave para cuidar la salud de la democracia y los sistemas electoralesā. Angel Garibay, Consultor Digital Senior en Zimat Consultores
FragmentaciĆ³n polĆtica y manipulaciĆ³n de informaciĆ³n
Un caso emblemĆ”tico del poder de las redes sociales fue el referĆ©ndum del Brexit en 2016. La campaƱa a favor de la salida del Reino Unido de la UniĆ³n Europea utilizĆ³ Facebook de manera intensiva para promover mensajes emotivos, apelando a preocupaciones sobre la inmigraciĆ³n y la soberanĆa nacional.
De acuerdo a informaciĆ³n de la BBC, la campaƱa pro-Brexit invirtiĆ³ 2.7 millones de libras en publicidad en Facebook . El uso de datos por parte de consultoras como Cambridge Analytica tambiĆ©n destacĆ³ el potencial (y los riesgos) de las redes sociales para manipular la opiniĆ³n pĆŗblica.
En otros paĆses europeos como Francia y Alemania, las redes sociales han jugado un papel clave en la fragmentaciĆ³n polĆtica. En Francia, la elecciĆ³n de 2017 que llevĆ³ a Emmanuel Macron al poder se caracterizĆ³ por un uso sofisticado de las plataformas digitales para conectar con votantes jĆ³venes, mientras que en Alemania, el partido de extrema derecha AfD ha utilizado Facebook para ganar relevancia entre los votantes descontentos con la polĆtica tradicional.
La polĆtica digital en MĆ©xico
En MĆ©xico, las redes sociales jugaron un papel crucial en las elecciones presidenciales de 2018. Durante la campaƱa de AndrĆ©s Manuel LĆ³pez Obrador, su equipo hizo un uso estratĆ©gico de plataformas como YouTube, donde el presidente solĆa publicar videos informales, conectando directamente con los votantes, principalmente jĆ³venes. Esta estrategia le permitiĆ³ contrarrestar la cobertura negativa en medios tradicionales y dar a conocer su mensaje sin intermediarios.
Para las elecciones de 2024 el uso de redes sociales se disparĆ³ aĆŗn mĆ”s. Los partidos polĆticos mexicanos invirtieron en publicidad digital y en campaƱas de influencers, aprovechando la tendencia de micro influencers para llegar a audiencias mĆ”s segmentadas y de nicho, lo que resultĆ³ clave para atraer el voto joven y de primera vez.
Pero el impacto de las redes sociales no acaba tras la elecciĆ³n. De acuerdo a un anĆ”lisis publicado por Zimat Consultores, antes, durante y despuĆ©s de la toma de protesta de Claudia Sheinbaum se registraron mĆ”s de 154,000 menciones directas en redes sociales, con la conversaciĆ³n centrĆ”ndose en los 100 puntos de su gobierno que compartiĆ³ durante su discurso en el ZĆ³calo.
Las redes sociales han cambiado por completo la forma en que se hace marketing polĆtico, facilitando que los candidatos se acerquen de manera mĆ”s directa a los votantes. Sin embargo, tambiĆ©n han traĆdo problemas como la desinformaciĆ³n y la polarizaciĆ³n.