Sabemos que en el mundo existe mucha desigualdad en la distribución de la riqueza, una situación que para diversos especialistas económicos se ha agudizado a causa de la pandemia del coronavirus, ya que uno de sus principales (y múltiples) efectos) ha sido el desempleo, lo que ha presionado económicamente a millones de personas. Esto es lo que buscan atacar un bloque de gente como Abigail Disney y más de 80 de las personas más ricas del mundo.

A través de un bloque que une a personas con grandes fortunas, han lanzado un llamado a los gobiernos pidiendo que se incrementen los impuestos a los más acaudalados para ayudar a lo más vulnerables.

Una carta abierta

El grupo autodenominado Millionaires for Humanity (o Millonarios por la Humanidad) han lanzado una petición pública a los gobiernos de todo el mido para que se definan e implemente impuestos inmediatos, sustanciales y permanentes que apliquen para los ricos.

La finalidad de tal medida, según el bloque conformado por más de 80 multimillonarios procedentes de países como Alemania, Canadá, Estados Unidos, Nueva Zelanda y Países Bajos, es que con esa recaudación fiscal serviría para ayudar a financiar la recuperación económica que se necesita como resultado de las consecuencias de COVID-19.

De tal forma y, a través de una carta abierta firmada por nombres como Abigail Disney, heredera del imperio Disney; el cofundador de Ben & Jerry, Jerry Greenfield; el ex director gerente de BlackRock, Morris Pearl; y el director de “Love, Actually”, Richard Curtis, se hace una declaración contundente: “(…) que los gobiernos aumenten los impuestos a personas como nosotros. (…) Inmediatamente. Sustancialmente. Permanentemente”.

Lo que expone la carta

“Cuando el Covid-19 golpea al mundo, los millonarios como nosotros tienen un papel fundamental que desempeñar en la curación de nuestro mundo. No, no somos nosotros los que cuidamos a los enfermos en las salas de cuidados intensivos. No estamos conduciendo las ambulancias que llevarán a los enfermos a los hospitales. No estamos reabasteciendo los estantes de las tiendas de comestibles ni entregando alimentos puerta a puerta. Pero tenemos dinero, mucho. Dinero que se necesita desesperadamente ahora y seguirá siendo necesario en los próximos años, a medida que nuestro mundo se recupere de esta crisis.

Hoy, nosotros, los millonarios abajo firmantes, pedimos a nuestros gobiernos que aumenten los impuestos a personas como nosotros. Inmediatamente. Sustancialmente. Permanentemente”, señala la misiva.

En ese sendo, exponen que los firmantes de la carta nunca “tendrán que preocuparse por perder nuestros trabajos, nuestros hogares o nuestra capacidad de mantener a nuestras familias”. Por ello, es que consideran que aportar a través del pago de más impuestos “es la elección correcta. Es la única opción. La humanidad es más importante que nuestro dinero”.

“Tenemos una enorme deuda con las personas que trabajan en la primera línea de esta batalla global”, agregan. “(…) tenemos dinero, mucho. El dinero que se necesita desesperadamente ahora y seguirá siendo necesario en los próximos años, a medida que nuestro mundo se recupere de esta crisis”, puntualizan.

Una economía que necesita todos los apoyos

La postura de personas que poseen gran parte de la riqueza del mundo es loable y muestra de su parte cierto grado de responsabilidad social. Lo interesante en este punto es que su pronunciamiento lo hacen a título personal y no de las empresas u organizaciones que representan, lo que legitima de cierta manera su discurso.

Al respecto, vale la pena señalar que, de acuerdo con un informe de Oxfam, los ricos del mundo tienen más riqueza que 4 mil 600 millones de personas. De hecho, se estima que los 2 mil 153 personas consideradas como multimillonarias, tienen más dinero que el 60 por ciento de la población mundial.

Dicho esto, el que un grupo de esa minoría esté impulsando un movimiento fiscal para impulsar la economía de los más necesitados es destacable, pero habrá que esperar lo que determinen los gobiernos.

No obstante, debemos señalar que hoy la economía global requiere todo el apoyo que se le pueda brindar. Las estimaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI) apuntan a una abrupta caída del PIB Global en 2020 cercana al 3 por ciento. Si eso se cumple, estaríamos en la peor crisis desde la Gran Depresión de los años 30.