La realidad actual es que cada vez está más presente en la vida cotidiana de las personas, incluso sin percatarse de ello; mientras que dentro del mundo empresarial se ha convertido en un imperativo al momento de analizar las distintas variables que pueden afectar el negocio, para bien o para mal.
Porque de ello se trata la IA, de poner a la mano de las personas una capacidad de análisis superior y más eficiente a la que cualquier humano podría tener. Si bien hay ciertas actividades dentro de una empresa que pueden ponerse en “manos” de sistemas de inteligencia artificial, como los chatbots que sustituyen en parte la labor de agentes de servicio al cliente, la IA no ha llegado para sustituir a los humanos, sino para incrementar y mejorar las capacidades del pensamiento humano.
El principio fundamental es imitar lo que hace una persona para posteriormente replicarlo y eventualmente superarlo, todo a partir de las interacciones que tiene el sistema y el análisis de datos que se le proporcionan. Dentro de esta premisa se está convirtiendo en una piedra angular en los procesos de innovación que llevan a cabo las empresas.
Una aplicación práctica de la IA que generó resultados más que positivos dentro del ámbito empresarial es la experiencia de la plataforma de streaming Netflix. Hace seis años, con el uso de la IA la compañía logró incrementar en 25% su base de suscriptores gracias al uso del machine learning para ofrecer un nivel de personalización más acorde a cada usuario.
Brindar una mejor experiencia al usuario es uno de los aspectos en los que más se está sacando ventaja de la inteligencia artificial. El análisis de datos y comportamientos que permite la IA ayuda a determinar de mejor manera patrones de consumo, hacer predicciones sobre los mismos y con ello trazar estrategias de marketing no sólo personalizadas en función de productos y servicios, sino también en términos del mejor tiempo para llevarlas a cabo.
Una encuesta de la firma Gartner realizada a más de tres mil directores de tecnología y sistemas arrojó que la mayoría de los encuestados calificó la analítica e inteligencia empresarial como las tecnologías de diferenciación más importantes para sus organizaciones en el corto plazo. Es precisamente el área de inteligencia artificial donde más están apostando en términos de inversiones para impulsar la innovación dentro de sus compañías.
El marketing digital es una de las ramas que más provecho puede sacar de la inteligencia artificial, debido a que el primero requiere procesar enormes cantidades de datos, y el segundo se encarga precisamente del análisis de datos de forma rápida para poder llevar a cabo estrategias digitales más eficientes.
Entre las actividades que se pueden llevar a cabo utilizando inteligencia artificial se encuentran el marketing de contenidos, que permite la personalización de la experiencia de contenidos y agilizar el ciclo de venta. Generación de contenidos, a través de programas que elaboran textos de acuerdo a las directrices indicadas y optimizaciones para SEO.
Manejo de redes sociales, con aplicaciones que pueden ayudar a mejorar el aspecto visual de imágenes y videos con el objetivo de que generen mayor interacción y se vuelvan más virales.
También la publicidad en línea, a través de algoritmos de machine learning que analizan millones de datos de campañas en Google Ads, Instagram, Youtube y Facebook, para determinar las audiencias que son más redituables en las mismas.
La IA es una tecnología exponencial por los grandes saltos que ha dado en los últimos años, y los que se espera que siga dando. Sin embargo, no se debe olvidar que las máquinas ejecutan lo que se les ha transmitido a través de sus algoritmos, los cuales son creados por el hombre. Es decir, detrás de cualquier innovación siempre va estar la mente humana identificando las oportunidades para moldear el futuro con el apoyo de la IA.