La escasez de chips no parece ser un problema para las gigantes surcoreanas Hyundai Motor Co y su afiliada Kia Corp.
De acuerdo con sus pronósticos para 2022, la venta global de unidades de ambas marcas combinadas se incrementarán en un 12,11 por ciento, incluso cuando las dos empresas vienen de un 2021 en el que no se alcanzaron las expectativas por la falta crónica de chips y la llamada “crisis de los contenedores“.
Las dos compañías en forma combinada comercializaron en 2021 6,65 millones de vehículos, esto es casi el 3,8 por ciento menos que sus objetivos iniciales de vender 6,91 millones.
La mayor causa del derrumbe de ventas del año pasado: la escasez de chips, que redujo la entrega de unidades en todo el mundo y frenos de diversa envergadura en las plantas de las marcas.
La idea ahora es incrementar las ventas en todos los mercados y llegar a 7,5 millones de unidades vendidas en 2022, lo que elevaría al grupo al top 5 de las compañías con mejor desempeño.
“En 2022, Hyundai Motor espera poder hacer una expansión de su market share y fortalecer los beneficios por medio del esfuerzo de las marcas y de una estabilización de la oferta y la demanda de chips”, dijo Hyundai en un comunicado oficial.
Entre la estrategia de marketing para 2022 figura “el ajuste de los cronogramas de producción de vehículos en todo el mundo, fortalecer las líneas de autos eléctricos y optimizar las ganancias y pérdidas de ventas por región”, agregó.
Hyundai Motor tiene ocho plantas de fabricación, 7 centros de diseño y técnicos alrededor del mundo. Una de las fábricas está en México, en Pesquería, Nuevo León.
La falta de chips por una demanda desbordante de dispositivos de computación durante la pandemia de covid, afectó de manera grave a la industria automotriz, con cientos de miles de unidades en todo el mundo que no se pudieron producir por la ausencia de piezas clave.
Hyundai y Kia: advierten por la inflación
Según los analistas de Eugene Investment & Securities, si bien es interesante que las marcas esperen vender más, el escenario está lejos de aclararse.
Es que aunque el problema de la falta de chips se comenzaría a solucionar, el impacto llegaría ahora por los precios, que aumentarían debido al incremento de las materias primas vinculadas a la industria automotriz, reporta Reuters.
Todo esto tendría un impacto en las ventas o en la rentabilidad, de acuerdo con la estrategia de precios/venta que disponga cada automotriz.
Las novedades fueron bien vistas por el mercado. Las acciones de Hyundai Motor subieron casi un 1 por ciento.
Hyundai Motor había reducido sus objetivos de entregas globales de vehículos para el año pasado en casi un 4 por ciento: de 4,17 millones a 4 millones.