Buenos Aires, Argentina.- Vía pública, marketing político y marketing deportivo se mezclan con la designación del nuevo Papa. En la Argentina, aparecieron afiches que atribuyen la pertenencia de Jorge Bergoglio, ahora sumo pontífice, a las filas del partido peronista. También hay un boom de ventas de camisetas de San Lorenzo, el club de fútbol del Papa.
“El peronismo tiene un nuevo mito: entre sus filas hay un papa, Jorge Bergoglio, Francisco para los católicos”, de esta forma, el blog Etiqueta Negro –del periodista especialista en política argentina Juan Manuel González– encabeza su artículo semanal. “El papa llegó al Partido Justicialista a través de Guardia de Hierro, una organización que surgió en 1961 como parte de la ‘evolución’ de la Resistencia”, completa el informe que acompaña una imagen con la vía pública distribuida en las calles de Buenos Aires. La nota completa, aquí.
Más allá de la pertenencia o no, la oportunidad de hacer marketing político nadie la quiso perder. Tanto los referentes del oficialismo en la Argentina, como los líderes de los partidos opositores, aprovecharon la oportunidad de la designación del sumo pontífice para resaltar las virtudes que, a su juicio, condicen con sus respectivos pensamientos políticos.
En Córdoba, por ejemplo, el gobernador no desaprovechó la oportunidad y, sin demoras, inauguró (y difundó en los medios) una plaqueta en honor a Francisco.
Por otra parte, y siempre hablando de marketing, pero esta vez deportivo, el Club Atlético San Lorenzo de Almagro, el equipo del que Francisco es socio, vive un boom de venta de camisetas. “Esto es una locura. Es impresionante, indescriptible”, relato el vocero del club al medio Cancha Llena en relación con la venta de merchandising.
Según informaron, apenas se conoció la noticia de la designación, twittearon la foto de Bergoglio con la camiseta de San Lorenzo y, en pocas horas, la página del club ya se había colapsado, y los pedidos por la casaca del club del Papa Francisco llegaron de los lugares más remotos del globo terráqueo. “Queremos ver cómo hacemos para que le llegue a la gente las camisetas que piden. Todo esto nos tomó por sorpresa”, admitieron.
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