La humanidad enfrenta una problemática alimentaria grave: mientras que una gran parte del mundo sufre hambre y desnutrición, una cantidad igualmente considerable de alimentos se desperdicia. Cada año, se calcula que se pierde el 13 % de los alimentos mundiales en la cadena de suministro, entre la etapa poscosecha y la venta al por menor y se desperdicia otro 17 % de alimentos en los hogares, los servicios
alimentarios y el comercio al por menor, lo que equivale alrededor de 1,300 millones de toneladas de comida. Este problema es uno de los desafíos más urgentes que enfrentamos en la actualidad.
El año pasado, un rango medio de 753 millones de personas padecieron hambre en el mundo.
El desperdicio de alimentos es un dilema global que abarca desde la producción hasta el consumo final. Desde la recolección y transporte hasta la venta en supermercados y restaurantes, y finalmente, en nuestros hogares, se pierde una cantidad significativa de alimentos en cada etapa. En una época en la que la población mundial sigue creciendo y los recursos naturales se agotan, el tamaño de este problema es
alarmante.
Muchos sistemas agroalimentarios del mundo no son sostenibles porque degradan los terrenos agrícolas, contribuyen a los gases de efecto invernadero y a la pérdida de biodiversidad, además de consumir aguas subterráneas (las que se supone son las reservas del futuro y que ya están en muy alto riesgo por su sobreexplotación).
¿De qué manera ha intervenido la mercadotecnia para abordar el desperdicio de alimentos? Aquí algunos ejemplos:
1..-Save the Food (Salva la Comida): Esta campaña fue lanzada en Estados Unidos en colaboración con la Ad Council y la Natural Resources Defense Council (NRDC). La campaña utiliza anuncios de televisión, redes sociales y recursos en línea para educar a los consumidores sobre cómo reducir el desperdicio de alimentos en el hogar. Uno de sus anuncios más destacados mostraba a diversos alimentos en descomposición con una voz en off que decía;El desperdicio de alimentos no solo es una pérdida de comida, también es una pérdida de dinero y recursos
2.-The Ugly Carrot; La cadena de supermercados francesa Intermarché lanzó una campaña llamada ;Inglorious Fruits and Vegetables; (Frutas y Verduras Ingloriosas) que promocionaba productos estéticamente imperfectos a precios reducidos. Un anuncio llamado "The Ugly Carrot" mostraba una zanahoria torcida y desigual como una estrella de cine. Esta campaña destacó la belleza de los alimentos imperfectos y alentó a los consumidores a comprarlos en lugar de desecharlos.
3.-Feeding the 5000;Esta campaña global, organizada por Feedback, es una serie de eventos de comida gratuita en lugares públicos que utilizan alimentos rescatados de ser desperdiciados. Estos eventos no solo alimentan a miles de personas, sino que también educan sobre el problema del desperdicio de alimentos y cómo las soluciones innovadoras pueden marcar la diferencia.
4.Too Good To Go;Esta aplicación europea se ha convertido en un fenómeno al permitir a los usuarios comprar excedentes de alimentos de restaurantes, supermercados y panaderías a precios reducidos al final del día. Su enfoque en la lucha contra el desperdicio de alimentos ha resonado con consumidores conscientes y ha llevado a un rápido crecimiento en varios países.
¿Qué nos toca hacer a nosotros para un consumo responsable?
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) nos presenta seis formas para ayudarnos a amar más nuestra comida y desarrollar respeto por todo lo que hay detrás de lo que comemos:
1. Reduce el desperdicio de alimentos: compra solo los alimentos que necesitas, aprende a amar las frutas y verduras de aspecto feo, sírvete raciones realistas, ten en cuenta las fechas de caducidad, almacena los alimentos de manera inteligente, dona los excedentes y convierte los alimentos sobrantes en la comida del día siguiente.
2. Apoya a los productores de alimentos: Compra en mercados locales y conoce a los agricultores.
3. Valora el trabajo que requiere producir los alimentos: Cuando comes estás consumiendo los recursos naturales y el arduo trabajo de los campesinos, las abejas, quienes recolectaron los alimentos y todas las demás personas involucradas en conseguir que los alimentos lleguen a tu plato. Aprecia la comida como si fuera una obra de arte.
4. Adopta una dieta más saludable y sostenible: Necesitamos entender que los alimentos son energía. Consumir demasiada comida en general, o demasiada comida de un solo tipo puede conducir a la obesidad, a carencias o a enfermedades relacionadas con la dieta.
5. Aprende de dónde proceden los alimentos: Al aprender más sobre nuestra comida, de dónde viene, qué alimentos se producen en cada temporada y qué se necesita para producirlos, aumentamos nuestro conocimiento y respeto por lo que estamos comiendo.
6. Mantén una conversación: al tratar cada comida con orgullo, respetamos a los agricultores que lo produjeron, los recursos que se utilizaron para producirlo y las personas que no pueden disfrutarlo. Habla con las personas que te rodean y con las nuevas generaciones sobre cómo elegir de forma informada alimentos saludables y sostenibles.
Hoy es 29 de septiembre: Día Internacional de Concienciación sobre la Pérdida y el Desperdicio de Alimentos La mercadotecnia desempeña un papel crucial al tener la oportunidad de generar conciencia pública sobre este problema y alentar a las personas a tomar medidas.
Tú, que tienes en las manos esa herramienta tan poderosa, ¿Qué vas a empezar a hacer para promover conciencia sobre este problema global?
