Hermann von der Meden
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@hvonder
Bueno, pensemos que usted y su gente están dispuestos a aceptar a la creatividad como una norma y disciplina de trabajo diaria. Que todos están abiertos al mundo de las ideas y la innovación.
Hay una serie de factores que tienen que considerar: Forzarse a no hacer sus labores de manera acostumbrada y cómoda. Abandonar su mundo acogedor de juicios rápidos. Evitar reuniones donde algunas personas buscan ser creativas y otras analíticas. Y lo más importante, dejar que las ideas fluyan. Sea para mejorar algún sistema de trabajo, método de presentación, desarrollo de producto o publicidad para alguna de sus marcas.
Una idea es como una flor. Cuando esta nace es frágil y pequeña y es cuando más fácil resulta matarla.
En la publicidad pasa muchas veces lo mismo. La agencia llega con ideas nuevas y frescas que le llevaron un par de semanas sembrar y empezar a germinar. Obviamente estas ideas, en su primera etapa, necesitan cuidados y riego. Que todos los involucrados abonen esta idea para hacerla crecer. Desafortunadamente muchos tienden a aplastar las ideas antes de que puedan echar raices. Una idea nueva es delicada y voluble. Es posible matarla con una burla o con un bostezo; un chiste puede ser como un tiro de gracia. Una cara de rechazo de la persona precisa puede provocarle la muerte por abandono.
Recordemos que una idea es un punto de partida y nada más. En cuanto todos la amplíen, el pensamiento y la inercia la transformarán.
A continuación hay ocho frases que desafortunadamente suelen emitirse cuando se presenta algo nuevo, sea creatividad publicitaria, un plan de medios, una estrategia interna, un desarrollo de empaque o producto, etc ( y estoy seguro que debe haber como 10 más)…..
“Sí, pero…”
Sí pero qué. Por qué no mejor decir “Es algo diferente que podemos explorar”
“Ya lo intentamos antes”
¿Y? No podemos volverlo a intentar. El mercado es cambiante y el consumidor evoluciona.
“Eso no va a funcionar”
Si no creyera la agencia que puede funcionar, no lo presentaría.
“¿Ya pensaron lo que eso implica?”
Seguramente si implica algo más, es porque tiene potencial para trascender.
“No tenemos tiempo para eso”
¿Queremos soluciones tipo fast food o gourmet?
“El consumidor no lo va a entender”
¿Por qué siempre tachamos de idiotas a los consumidores?
“Muy caro. Piensen algo más barato”
¿Cuánto vale para un gerente su marca? Para algunos parecería que poco.
“Testemoslo”
¿Miedo a tomar una decísión equivocada?
Desafortunadamente la creatividad es más veces destruida, de las que se apoya. Y esto sucede en la publicidad, dentro de las empresas y en la vida diaria.
Arriesguese un poco y atrévase. Con su agencia, con su personal, con usted mismo. La creatividad es un comportamiento, la innovación es un proceso.
Finalmente y como decía Hubbard: “El mayor error que puede cometer en la vida es el de vivir en el temor de cometer alguno”.