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Se espera que la economía llegue a su punto más bajo de crisis justo a mediados del año
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Las estimaciones iniciales posicionaban este momento en marzo, con una tasa de pérdida del -2.47 por ciento
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Originalmente, se tendría que haber cerrado el año con un crecimiento de la riqueza global de un 3.5 por ciento
A lo largo de todo el planeta, fábricas y negocios permanecen cerrados. Millones de personas ya perdieron su empleo ante las radicales medidas que algunas empresas tuvieron que tomar para seguir siendo rentables. Y con tanta productividad perdida, no es sorprendente que la economía global esté preparándose para un descalabro como pocas veces se ha visto antes. Sin embargo, lo anterior no significa que este fenómeno afecte por igual a todos los países.
Un estudio de Bloomberg Economics volvió a hacer un cálculo de cuánto podría costarle esta crisis sanitaria a la economía global. La nueva estimación cree que, en el mejor de los casos, se podrían perder alrededor de seis billones de dólares en todo el mundo por culpa de esta pandemia. Esto sería igual a una contracción de cuatro por ciento frente a la cifra para 2019. No sería sino hasta la segunda mitad del 2020 que empezaría a darse una recuperación.
Por supuesto, no todo el mundo se verá afectado de la misma manera. Se espera que cada país depende mucho de las políticas de sus gobiernos para lograr una buena recuperación. Como ejemplo, en el caso de los Estados Unidos (EEUU) se vería una caída del 6.4 por ciento anual frente a 2019. Europa, por otro lado, podría desplomarse hasta 8.1 por ciento. Japón se descalabraría en cuatro por ciento. Pero la economía de China, a pesar de la crisis, crecería.
¿Qué hace a la economía de China tan especial?
Como la COVID-19 surgió en este país asiático, ha estado bajo los reflectores desde casi el inicio del 2019. China ha sido un ejemplo a seguir sobre cómo las marcas e industrias pueden sobrevivir a la pandemia. Asimismo, ahora que su brote está bajo control, está siendo punta de lanza en el apoyo médico a otras zonas. En su momento, cuando era la única región afectada, incluso se llegó a analizar cómo el golpe a su economía afectaría a la dinámica internacional.
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Siendo que todos los países parecen estar perdiendo ante la COVID-19, en los términos de la economía, ¿por qué China sigue hacia adelante? Primero, hay que recordar que desde hace mucho tiempo que el país asiático es de los que tiene el crecimiento más acelerado incluso antes de la crisis sanitaria. Este factor le permite seguir en expansión, a pesar del golpe de la pandemia. Y no es como que no haya resultado afectado en lo absoluto por este fenómeno.
De acuerdo con Bloomberg, la economía de China crecerá a su menor nivel en varios años. De todas formas es una proeza importante, que se puede también adjudicar a la forma en la que se lidió con el virus. Claro, la forma en la que se implementó la sana distancia fue muy violenta para los regímenes democráticos de occidente. Pero eso permitió que la COVID-19 quedara más o menos bajo control y que sus efectos en la actividad productiva fueran aún más ligeros.
Manejo de la COVID-19 en otros países
No todas las naciones abordaron la pandemia de igual forma, por lo que su economía no se va recuperar igual de rápido. Por ejemplo, en EEUU el proceso ha estado lleno de desinformación y fake news que parecen agravar el brote y reducir la efectividad de la respuesta. En Europa, algunas marcas están recibiendo la orden de empezar a reanudar operaciones, con el fin de volver a poner sus finanzas en marcha. En Latam, el consumo ha virado mucho a online.
Varios expertos tienen su propia opinión sobre lo que deberían hacer los países para reanudar su economía. De acuerdo con Eastasia Forum, es crucial que los gobiernos entiendan que la crisis no tiene precedentes, y necesita nuevas medidas de mitigación. Por su lado, IBJ asegura que las autoridades deben hacer lo posible para evitar la ruina financiera de los individuos a través de incentivos. Y The Hill propone complementarlos con préstamos a las compañías.