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Según la misma Blockchain, el Bitcoin es la divisa más valiosa entre las principales criptomonedas
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Actualmente, esta moneda tiene un valor de poco más de nueve mil 500 dólares por unidad
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Según Facebook, su proyecto crypto tomaría su valor de monedas establecidas, como el dólar y el euro
Previo al anuncio de Libra, las criptomonedas eran consideradas por público y reguladores como una herramienta financiera poco confiable, pero limitada a un sector especializado.Pero el proyecto de Facebook abrió una enorme (y para algunos, preocupante) posibilidad. Que prácticamente todo el público pudiera usar estos recursos en transacciones diarias.
Y los jugadores más relevantes de las criptomonedas no quieren quedarse atrás. Blockchain, la compañía homónima de la tecnología detrás de estas divisas, quiere lanzar un nuevo mercado de intercambio. Según Reuters, esta plataforma permitiría el intercambio de dinero virtual en cuestión de microsegundos. Esto, en teoría, reduciría el peligro de la volatilidad de la tecnología. Y, por tanto, permitiría su uso en retail e inversiones institucionales.
Competencia en la industria de criptomonedas
No solo Facebook y Blockchain han tratado de traer las divisas digitales al mercado general. En febrero, JP Morgan lanzó su propia iniciativa en el entorno de las criptomonedas. Otras marcas e instituciones, como Uber y el gobierno japonés, también se han aventurado en el sector. Incluso se ha planteado el uso de la tecnología para librar bloqueos comerciales.
Pero todas estas iniciativas enfrentan retos muy similares: la desconfianza. De acuerdo con Statista, la divisa digital más activa tiene poco más de 40 millones de carteras digitales a escala global. Según el Bitcoin Market Journal, apenas una de cada tres cuentas son activas. A eso hay que sumarle que, solo en Estados Unidos (EEUU), menos del cinco por ciento de la población participa en el mercado de las criptomonedas.
Así pues, la adopción de estas soluciones todavía no es muy alta. Y si la confianza en las criptomonedas originales es poca, nuevas propuestas (como la de Facebook) son todavía menos confiables e interesantes para el público general. Así que las marcas que quieran internarse en este mercado, deben primero abordar estos retos. De lo contrario, la alta inversión en la estructura tecnológica podría no tener un buen retorno a mediano plazo.