Durante el fin de semana se dio a conocer que la aplicación de LaLiga, el torneo de futbol de España, que esté instalada en el sistema operativo Android, tiene la autorización de los usuarios para que encienda de forma automática el micrófono del dispositivo cuando sabe, debido a que también el GPS, que los aficionados están en un bar viendo el futbol con la finalidad de detectar si el establecimiento en cuestión tiene licencia de transmisión o lo hace de manera ilegal.

Según múltiples reportes de prensa, la Agencia Española de Protección de Datos ya está estudiando el caso para revisar si es que existe alguna ilegalidad. De acuerdo con la descripción oficial de la aplicación, esta “podrá activar el micrófono del dispositivo para conocer si estás viendo partidos de futbol de equipos de LaLiga. Esta información se utilizará para detectar fraudes”.

El descubrimiento de este hecho lo realizaron los abogados especializados en tecnología, Jorge Morell y Esther Botella a través de Twitter; luego de precisar que la herramienta pedía permisos atípicos, reportó El Mundo. Tras analizar las condiciones de uso, descubrieron el por qué.

Y es que la aplicación no avisaba sobre este uso hasta ahora que se vio obligada a aclarar el comportamiento tras la implementación de la legislación europea de privacidad. La liga profesional de futbol en España declaró a El Diario que todo el procedimiento sería confidencial y legal porque “nadie accede a los fragmentos de audio captados por el micrófono” y porque “ se convierte de forma automática en una señal, un código binario”.

Por su parte, LaLiga emitió un comunicado para aclarar la situación; “LaLiga tiene la responsabilidad de proteger a los clubes y sus aficionados del fraude en la emisión de partidos de futbol por parte de establecimientos públicos. Esas actividades fraudulentas suponen anualmente una pérdida estimada de 150 millones de euros para el futbol español”, detalló el organismo.

De igual forma detalĺó que la aplicación activará el micrófono y el geoposicionamiento del dispositivo siempre y cuando el usuario decida aceptarlo. Además de que sólo se realizará este hecho durante las franjas horarias de partidos en los que compitan los equipos.

La falta de lectura en los permisos a los que acceden las aplicaciones, así como otros actos derivan en una laguna legal en la que todo se remite a un comportamiento moral; los mecanismos acceden a funciones del teléfono de un usuario con autorización del mismo, aunque después se acuse de espionaje, los permisos deben ser leídos y comprendidos a fin de saber qué tipo de información sustraerá la aplicación.