Internacional.- Hace un par de dĆas, mostrĆ”bamos dos comerciales diferentes y lo hacĆamos pensando en los elementos que nos conectan con las emociones de otras personas. Hoy me encuentro con toda la campaƱa de DDB Paris para Nat Geo, la cual sigue con el concepto de lo impactante que resulta la naturaleza en un mundo donde todo puede ser modificado por Photoshop.
La nitidez de la imagen, nos lleva a viajar por el mundo salvaje y desconocido, para la mayorĆa, de la jungla. De alguna forma nos retrotrae a la infancia donde los americanos, todos, mĆ”s de alguna vez soƱamos con encontrarnos en medio de un safari en Ćfrica. Sin duda es una campaƱa que apela a nuestra parte salvaje tambiĆ©n y por eso resulta tremendamente atractiva.
En los comerciales que van a ver a continuaciĆ³n, el esquema es similar al primero que analizamos, donde el locutor habla de lo que āno fue necesario hacerā para la producciĆ³n: llevar numerosas mĆ”quinas de humo para simular vapor en el pantano, pintar de dorado el amanecer, pintar de verde los Ć”rboles y la posiciĆ³n de los protagonistas, entre varios etcĆ©teras.
Luego en otro video se refiere a la falta de coreografĆa en la grabaciĆ³n, de lo innecesario de los ensayos para conseguir la gracia e intensidad que observamos y entonces el movimiento de los animales nos recuerda una danza magnĆfica.MĆ”s tarde dirĆ” que el lagarto no necesita un doble de cuerpo para realizar las escenas que vemos mientras Ć©l habla.Todo el tiempo se juega con el paralelo de una costosa producciĆ³n llena de ilusiones versus la fuerza de lo real.
Nat Geo Wild y su nueva campaƱa es consecuente con su slogan āNada es tan poderoso como la realidadā. Todo estĆ” ahĆ y es impresionante.
EstĆ” claro que el āproductoā en sĆ es realmente hermoso, pero no podemos olvidar que ese concepto, ese slogan puede abarcar muchĆsimos productos. Observar que sucede con la gente en diferentes situaciones, es la mejor herramienta para saber quĆ© botones emocionales tocar. Y esa es una de las cosas geniales del marketing y la publicidad, que no se trata de venderle algo a la gente, sino de descubrirla y ofrecerle posibilidades de acuerdo a sus necesidades y sus particulares caracterĆsticas. Abrir los ojos es la consigna.