Las campañas internacionales son lanzadas con regularidad por grandes marcas cuya presencia es bien reconocida en cualquier mercado del mundo.
Marcas que cumplen con estas características son Procter & Gamble, McDonald’s o Unilever. En el caso de P&G y Unilever, al tratarse de grupos que aglomeran una gran cantidad de marcas, la diversidad de mercado que logran las ha llevado a mantener esta apuesta con campañas internacionales que son adaptadas a los mercados.
La adaptación es la estrategia con que la que se comunica la idea central de una campaña, por lo que factores geográficos o culturales como el idioma, logran ser superados para que la ejecución publicitaria cumpla con su objetivo no solo de inversión en marketing, sino de comunicación con el consumidor.
En el mundo, por ejemplo, se espera una inversión publicitaria a nivel mundial de 660.88 mil millones de dólares, según estimados de PwC, cifra que ha venido creciendo desde 2009, cuando el número reportado era de 438.25 mil mdd.
La adaptación también surge como recurso cuando una campaña pensada en un formato debe de comunicarse en uno diferente como el impreso o digital, haciendo que la aceptación del producto cumpla con los objetivos de la campaña.