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En el 2022, más de mil empresas occidentales se retiraron de Rusia.
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McDonald’s es una de las marcas estadounidense que abandonó el mercado ruso.
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El Banco Central de Rusia advirtió que el PIB del cuarto trimestre podría caer hasta un 7,1 por ciento.
Este año Rusia fue testigo del abandono de muchas marcas importantes, luego de que el ejército ruso invadió a Ucrania. Una de estas marcas fue Krispy Kreme, que tras varios meses, ahora la popular franquicia de donas está siendo servidas en Rusia por una imitación local después de que la compañía estadounidense.
La nueva cadena, propiedad de Arkady Novikov, exfranquiciado de Krispy Kreme en Rusia, ha sido renombrada como Krunchy Dream.
De acuerdo a un informe de Reuters, Novikov recibió la aprobación de los reguladores rusos para registrar el nombre en septiembre.
Asimismo, la compañía con sede en Charlotte, Carolina del Norte, reveló en una presentación de agosto que dejó de operar sus 30 tiendas Krispy Kreme en Rusia.
Recordemos que fue una de varias grandes marcas que se fueron después de que las fuerzas rusas entraron en Ucrania en febrero. Donde marcas como McDonald’s, finalizó sus operaciones en Rusia en junio, y ha sido rebautizado como “Vkusno & tochka”, que se traduce aproximadamente como “sabroso y eso es todo”.
La comida servida por la cadena de comida rápida todavía usa el equipo que dejaron las franquicias de McDonald’s.
Por su parte, la marca Starbucks, la cadena de cafeterías con sede en Seattle, también retiró sus participaciones en Rusia y sus tiendas han sido renombradas como “Stars Coffee”. Las 130 tiendas Starbucks en Rusia fueron compradas por empresarios rusos locales.
A finales de noviembre, más de mil empresas occidentales se retiraron de Rusia, según un recuento actualizado de la Escuela de Administración de la Universidad de Yale.
Por su parte, los gobiernos occidentales también han impuesto sanciones a Rusia, incluidas aquellas contra su sector energético, a raíz de su invasión de Ucrania.
El Ministerio de Finanzas de Rusia publicó datos la semana pasada que mostraban que los ingresos fiscales de los sectores que no incluyen el petróleo y el gas cayeron un veinte por ciento en octubre, según The Washington Post.
Rosstat, la agencia estatal rusa de estadísticas, informó que las ventas minoristas cayeron un 10 por ciento año tras año en septiembre, mientras que la facturación de carga cayó un siete por ciento.
En los dos trimestres anteriores, la economía rusa se contrajo un 4,1 por ciento y un cuatro por ciento, respectivamente. El Banco Central de Rusia advirtió que el PIB del cuarto trimestre podría caer hasta un 7,1 por ciento.
Y es así, como en todos estos meses el mercado cambió por completo en Rusia y todo esto por el conflicto bélico que tiene el gobierno de Vladímir Putin con Ucrania, que hasta la fecha ya ha dejado millones de personas afectadas y muertos.
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