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La idea de un poliéster biodegradable es un gran paso para el apparel en el mercado sustentable.
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La sustentabilidad en moda ha llevado a todo tipo de esfuerzos, desde la confección de una prenda biodegradable, hasta máquinas que convierten prendas usadas en telas nuevas.
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Con la fabricación de sustitutos biodegradables de materiales como el poliéster, se consolidan los materiales con menor impacto en el medio ambiente al ser confeccionados en prendas.
La eventual sustitución del poliéster tradicional por uno sustentable no es el único cambio drástico que ha comenzado a despuntar en apparel de la mano de Kintra y su poliéster biodegradable; a los peleteros les ha tocado ver cómo sustitutos de pieles animales se emplean al mercado a partir de alimentos como el nopal o la piña.
“Se espera que el valor de mercado de los textiles bioplásticos haya crecido en más de 300 millones de dólares para 2025, de los mil nueve millones de dólares registrados en 2018. El segmento de uso final de la ropa representó más del 48 por ciento del mercado global de textiles bioplásticos en 2018. Europa mantuvo más que el 35 por ciento del mercado global de textiles bioplásticos ese año”, explicó Statista al presentar un estudio de Global Market Insights.
Poliéster biodegradable
Kintra, una marca especializada en la maquila de fibras, presentó un poliéster biodegradable y su emprendimiento ya tiene un capital de ocho millones de dólares en su ronda de inversión Series A.
La apuesta de Kintra es que con el capital que H&M le inyectó, entre otros grupos, emplee maíz para que a partir de una resina que obtiene de este grano cree un polímero que sustituye al contaminante poliéster, con una peculiaridad, y es que la marca podrá seguir usando las máquinas tradicionales para poder fabricar la tela, por lo que el costo en la fabricación de este material se reduce.
Un tercer aspecto importante, además de que es un material biodegradable y que ya cuenta con la inversión de H&M para realizarse, es que la marca ha tiene pruebas piloto con cuatro gigantes del apparel, entre ellos Inditex, por lo que podríamos comenzar a ver nuevas categorías de fast fashion, donde el poliéster con fecha de caducidad comience a ganar espacio en los inventarios de estas tiendas.
Como Kintra, que presentó un poliéster biodegradable, ya hemos visto la manufactura de productos elaborados a partir de sustitutos para piel de origen animal, como materiales a base de piña que han patentado nombres como Piñatex, material que fue creado por Carmen Hijosa, haciendo de esta pieza un recurso tremendamente valioso en consumo.
Marcas como D-Raíz han comenzado a usar este material en productos como Cartera Piñatex Negro Carbón, un accesorio que por 55 euros, poco más de mil pesos, ofrece una interesante funcionalidad para organizar billetes y monedas.
“La cartera Piñatex® negro carbón está manufacturada en Galicia con cuero vegano elaborado a partir de hojas de celulosa extraídas de las hojas de piña desechadas, que generalmente se dejan pudrir o se queman, con lo que también beneficia al medio ambiente”, explica la marca de su producto sustentable, que aclara cuidados en su piel elaborada a partir de la piña como limpiarlo con agua jabonosa, así como la aplicación de cera especialmente compuesta para darle vida al material.
Ambos materiales son importantes avances en la maquila de materiales que ayudan a crear productos con un ciclo de vida menos perjudicial y la promesa de desintegrarse con el medio ambiente, lo que evidentemente impone nuevas oportunidades de consumo responsable con el futuro del planeta Tierra.
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