El Tribunal de Justicia de Luxemburgo ha dictaminado este jueves que Facebook podría verse obligada a eliminar de su plataforma aquellos comentarios que se consideren inapropiados por parte del juez, después de la denuncia de el afectado.
Este derecho, sobre el que han venido presionando los tribunales europeos para que los comentarios sean buscados y borrados, no solo sería para el ámbito europeo, sino que tendrían que efectuarse también a nivel mundial.
El caso detonante
De esta forma, se estaría cumpliendo con el planteamiento realizado por la ex presidenta del grupo de los Verdes en el Parlamento austríaco, Eva Glawischnig-Piesczek en la demanda inicial introducida contra la red social en 2016, después de que fuese víctima de numerosos comentarios ofensivos –que eran públicos– de parte de un usuario por la posición de su partido ante un tema de refugiados.
Facebook no tomó ningún tipo de medida para eliminar los comentarios, por lo que Glawischnig-Piesczek decidió pedir a la red social que no mostrase o difundiese su imagen cuando estuviesen acompañados de mensajes denigrantes o similares, lo que la red social no hizo hasta que el tribunal de primera instancia le obligó y solamente cuando se trataba de acceder a ese material desde Austria.
Posteriormente, el Tribunal Supremo de Austria señaló que se trataba de comentarios que buscaban injuriar, difamar y atentar contra el honor de la demandante, mientras que consultaba al Tribunal de Justicia de la UE si se debía ampliar la eliminación a nivel mundial, aunque Facebook no esté al tanto de ellas.
Las leyes europeas
Según ha dictaminado el tribunal, “El Derecho de la Unión no se opone a que se obligue a Facebook a suprimir comentarios idénticos y, en determinadas condiciones, similares a un comentario declarado ilícito con anterioridad”, lo que significa que si se ha declarado ilegal un comentario en un país de la Unión Europea, también se podría solicitar que dicha prohibición se aplique al resto de países que no pertenezcan a ésta.
Una decisión que para algunos expertos puede ser de difícil aplicación, pues dependerá de la legislación de otros países también, mientras que para Facebook la medida atentaría contra la libertad de expresión, pues el uso de filtros para evitar estos contenidos específicos podría eliminar otros que si sean pertinentes.
Lo que si es seguro es que la Comisión Europea tiene el ojo puesto en la proliferación de mensajes de ofensivos, de odio, xenófobos y racistas que inundan las redes y aunque las mismas alegan que han tomado medidas y están eliminando gran cantidad de ellos en menos de 24 horas, Bruselas no considera que se esté haciendo lo suficiente para limitar su publicación.