Juegos Olímpicos París 2024, un compromiso sostenible

Los Juegos Olímpicos de París 2024 no sólo representarán la excelencia atlética sino también un compromiso con la sostenibilidad. Consideradas como las Olimpiadas más sostenibles hasta la fecha, París 2024 está estableciendo un estándar para eventos deportivos globales.

París 2024 se destaca al comprometerse a utilizar energía renovable para alimentar todas las instalaciones olímpicas. Esta transición hacia fuentes de energía limpias no sólo reduce la huella de carbono sino que también establece un modelo para eventos a nivel mundial, en especial rumbo al Mundial 2026.

Mientras que el transporte durante los Juegos Olímpicos se centrará en la movilidad sostenible. Desde vehículos eléctricos hasta opciones de transporte público eficientes, la ciudad del amor estará implementando medidas para minimizar las emisiones y promover una experiencia de juegos más amigable con el medio ambiente.

De hecho, las instalaciones olímpicas de París 2024 se están construyendo con un enfoque ecológico. Desde la elección de materiales hasta la gestión de residuos, cada detalle se ha diseñado considerando su impacto ambiental, dejando tras de sí una infraestructura que perdurará de manera sostenible.

Pero estas medidas innovadoras para minimizar el impacto ambiental comenzaron desde los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. Por ejemplo, en Tokio 2020 los atletas descansaron en camas hechas de cartón reciclado, además, los colchones fueron hechos de fibras de polietileno para que pudieran reciclarse un número ilimitado de veces. También, las medallas se produjeron a partir de viejos dispositivos electrónicos como teléfonos inteligentes y computadoras portátiles, incluso, el 90 por ciento de las ciudades y aldeas japonesas por dos años recopilaron estos materiales para producir las 5 mil medallas, se trata de 80 toneladas de dispositivos electrónicos recopilados.

Con los Juegos Olímpicos de 2024 en París, nuevos esfuerzos medioambientales están entrando en juego. Los espectadores se sentarán en sillas hechas de plástico reciclado de los contenedores locales de basura. De hecho, el ochenta por ciento de las 100 toneladas de plástico reciclado necesarias para fabricar los asientos provienen de los contenedores amarillos ubicados en Seine-Saint-Denis.

Mientras que la empresa Lemon Tri recogerá los residuos de plástico y los transformará en virutas de plástico triturado. Dichas virutas se mezclarán, calentarán y comprimirán en máquinas. Las láminas de plástico resultantes se alisarán, lijarán y se enviarán a otras empresas asociadas en Francia para ser cortadas y ensambladas.

Todo esto forma parte de la estrategia de «cero residuos» de París 2024 para limitar el uso de plástico de un sólo uso, implementar soluciones alternativas y fomentar una economía circular.

Aunque la sostenibilidad va más allá del reciclaje y el cuidado del agua, el objetivo real es generar conciencia sobre el impacto que tiene la sociedad en el planeta a través de acciones que permitan satisfacer las necesidades pensando en el futuro.