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Un Peje de 200 mil pesos, según información de Reforma, se ha convertido en la última locura de una marca de joyas para promocionarse en redes sociales.
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Dentro de esta polémica en el mercado de alto costo, donde vemos todo tipo de productos, un aspecto que no podemos perder de vista hoy en día es el que tiene que ver con la intervención de productos.
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Ya que estamos abordando el mercado de joyas personalizadas y que hay cada vez una mayor demanda por parte de los consumidores de poder hacerse de estas piezas icónicas, un elemento que no podemos perder de vista en ello es el valor que tiene este mercado.
Crear piezas como un “Peje” de oro que desatan conversación social en redes es parte de una estrategia de muchas marcas que lanzan productos que tienen este plus en cuanto tocan base en redes sociales.
El “Peje” es el apodo con que se comenzó a llamar a Andrés Manuel López Obrador en la pasada campaña presidencial y el nombre es una forma de identificarlo en todo tipo de conversaciones dentro de redes sociales.
La idea se ha convertido en una apuesta que no tiene desperdicio y por el contrario, nos revela lo importante que es contar hoy en día con productos que logran consolidarse en el mercado por la creatividad con que están ejecutados, que ha llevado a muchos de estos a protagonizar la polémica, cuando unos tenis de Nike lograron la misma conversación al ser vendidos con una gota de sangre en sus suelas, como parte de una propuesta tipo “custom” de MSCHF y promocionados por el rapero Lil Nas X.
Una joya viral
Un Peje de 200 mil pesos se ha convertido en la última locura de una marca de joyas para promocionarse en redes sociales, con un diseño que ha comenzado a generar críticas dentro de estas plataformas.
La cadena de joyas Mayorquín se dio a la tarea de lanzar una pieza de oro que ha dicho se encuentra valuada en 200 mil pesos y es una recreación de la silueta caricaturizada de Andrés Manuel López Obrador, que fue ampliamente usada durante su campaña presidencial.
“Y pues aquí está el controversial ‘Peje’ disponible para envío inmediato”, señala el creador de la pieza en una acción que es parte del trabajo de muchos joyeros, creando piezas personalizadas, las cuales plasman productos o imágenes comunes y populares.
Esta tendencia crece ante la demanda de personalización por parte de los consumidores de lujo, que exigen cada vez más piezas únicas que se adapten a su estilo de vida.
Más allá de la personalización de este tipo de piezas, un elemento que no podemos perder de vista es cómo un producto polémico, sin importar cómo se aborde, se convierte en una estrategia de contenido para las marcas que lo aborden.
Productos con oro de 14K o sangre
Dentro de esta polémica en el mercado de alto costo, donde vemos todo tipo de productos, un aspecto que no podemos perder de vista hoy en día es el que tiene que ver con la intervención de productos y cómo estos generan polémica.
El caso de un “Peje” de oro de 200 mil pesos es destacable, pero hay otros productos que no necesitan brillar, por el contrario, una gota de sangre es todo lo que les ha hecho falta para convertirse en piezas de encanto y lo más importante, en referentes que hoy en día no dejan de decepcionar en consumo.
A detalle.
Ya que estamos abordando el mercado de joyas personalizadas y que hay cada vez una mayor demanda por parte de los consumidores de poder hacerse de estas piezas icónicas, un elemento que no podemos perder de vista en ello es el valor que tiene este mercado.
Dentro de un estudio de Market Study Report se encontró que a nivel mundial, el valor de este mercado de joyas alcanzó en 2019 los 229 mil millones de dólares en el mundo y para 2025 se espera que este valor se detone hasta los 291 mil millones de dólares.
El crecimiento es sin lugar a dudas síntoma de lo bien que le va a esta industria y cómo estas propuestas, en que vemos un “Peje” de oro no tienen desperdicio y son parte de la apuesta por seguir siendo relevantes.
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