A casi 50 años de la Revolución en México, los abuelos de los años 60´del Siglo XX, hacían mención con gran afectación, a la Revolución Mexicana (1910-1917).
Los abuelos de los años 60´s nos contaban la historia que se escribió y que abarca de 1917, hasta casi finales del siglo XX; describían hechos que nos han marcado como sociedad y que están plasmados en la historia y en la Constitución Política de México de 1917 promulgada el 5 de febrero de 1917 hace 101 años, y en todas sus reformas llevadas a cabo hasta este 2018 en las que hay aportaciones muy importantes, así como temas que deberán reformarse y ajustarse a la transformación del mundo, el impacto de la tecnología, y a principalmente a los requerimientos de la sociedad mexicana del Siglo XXI.
Los abuelos de ayer, hoy y los del futuro
Por su parte, los abuelos de este siglo XXI, rememoran con dolor y esperanza el llamado “Movimiento Estudiantil del 68”. Con dicho movimiento se logró avanzar en democracia, tan es así, que esos jóvenes del 68 este primero de diciembre de 2018 arribarán al poder político. Más han quedado cuentas pendientes como lo es la violencia, corrupción, impunidad y justicia.
Los jóvenes que participaron activamente, de diversas formas, en el movimiento de 1968, surcaban los 15 a los 25 años; hubo jóvenes que no se doblaron por miedo ante el embate violento del entonces secretario de gobernación Luis Echeverría Alvarez y del presidente Gustavo Diaz Ordaz, después de su informe del 1 de septiembre de ese trágico año.
En ese contexto del 68, a los jóvenes se les erizaba la piel del evidente miedo, cuando tanques de guerra del Ejercito de México, arribaban a los diversos escenarios; como ese 27 de agosto de 1968, cuando en el Zócalo de la CDMX cundió el desconcierto con el desalojo violento que hicieron los militares enviados por el gobierno.
Que decir de las imágenes que veíamos y que hoy se pueden examinar relativas al declarado genocidio del miércoles 2 de octubre de 1968, a partir de la luces de bengala lanzadas por un helicóptero del ejército, como señal de embestida, cuando eran las 18:10 horas, en “La plaza de las Tres culturas en Tlatelolco” aproximadamente ocho mil personas, entre jóvenes, adultos y niños, sufrieron la sorpresiva acometida del ejército con varios contingentes, entre otros, los del 40º 43º, 44º y 19º batallones de infantería y un escuadrón blindado de reconocimiento además del 1er batallón de infantería de Guardias Presidenciales, todos dirigidos hacia Tlatelolco, bajo el mando del General Crisóforo Mazón Pineda comandante en jefe de la “Operación Galeana” nombre con el que se identifica esta movilización castrense de ese fatídico día (el 2 de octubre de 1968), bajo las órdenes del Secretario de la Defensa Nacional General Marcelino García Barragán.
Y no podemos dejar de mencionar al Batallón Olimpia, grupo paramilitar de contrainsurgencia creado por el gobierno de México con el fin de vigilar, espiar, perseguir, hacer acciones de sabotaje, realizar detenciones e infiltrar el Movimiento de 1968 en México dirigido por el general Luis Gutiérrez Oropeza también integrado por elementos del Estado Mayor Presidencial y la Dirección Federal de Seguridad, la Policía Judicial Federal, la Policía Judicial del Distrito Federal y la Inspección Fiscal Federal. Se calcula que tenía entre 1,500 y 2,000 elementos.
El movimiento estudiantil del 68 representa un hecho importante para el incuestionable avance democrático, que se vio fortalecido por acciones en las elecciones estatales del estado de Chihuahua y en las elecciones federales, ambas en 1988 y otras más. Expresábamos en párrafo anterior, que, no obstante, en pleno siglo XXI y en este 2018, hay muchas cuentas pendientes, mismas que a la fecha remachamos: la corrupción, impunidad, la falta de justicia y la brutal violencia.
Los testimonios vivientes
También existen huellas imborrables de ese 68, mismas que permanecen plasmadas en diversas manifestaciones artísticas, y en el testimonio de nuestros familiares, padres, abuelos, parientes en general, así como de adultos en general, ciudadanos de a pie, que se mostraron solidarios con esos jóvenes del 68, hoy viejos lobos de mar, llamados también “Baby Bommers”.
La Universidad Nacional Autónoma de México, a través de su división Cultura UNAM presenta un repositorio digital sobre los movimientos sociales que, desde 1968 a la fecha, han impulsado el reconocimiento de derechos en México. De consulta abierta y en permanente construcción, M68 es una iniciativa en la que colaboran múltiples archivos públicos y privados. Los testimonios son valiosos en todo su género, ya que ayudan a buscar la verdad y fortalecerle ante los dudosos testimonios oficiales.
Muchos testimonios, sin embargo, a 50 años no aprendimos la lección
Hoy ya nos acostumbramos a ver, casi de manera instantánea, a través de los diversos medios de comunicación digitales, tráileres mortuorios en las calles, en el campo, o fosas clandestinas en cantidades inimaginables e impensables. Con el movimiento del 68 se logró avanzar en democracia más no en justicia, ni en pobreza, así como tampoco en la actitud corrupta e impune de los gobernantes, unos tras otro, sexenio tras sexenio.
Jóvenes del Milenio, “Hoy toca”
Confiamos que para las nuevas generaciones su camino, será de mayor conciencia, crítica y mucha acción; casos como los 43 desaparecidos de Ayotzinapa son muy graves, y encarnan heridas abiertas, así como los temas de corrupción e impunidad; que mejor ejemplo que el del exgobernador de Veracruz Javier Duarte y la acción desproporcionada de la justicia mexicana al imponer sanción.
Es una situación obligada el que los jóvenes de hoy establezcan sus banderas, marquen su camino, fortalezcan su conciencia y que no permitan que se siga perdiendo algo que nos diferencia de los animales como lo es la capacidad de asombro y de enfado ante los hechos mencionados y los que vivimos día con día.
Reconocemos y aplaudimos a los jóvenes de hoy que se suman al grito de: “2 de octubre Nunca Más”, pero estamos muy conscientes que 1968 es una página de la historia que ha aportado mucho y que ahora la pregunta y expresión positiva es ¿Jóvenes millennials, qué les toca por hacer?, tenemos más que pruebas indiscutibles que ustedes tienen con qué abrir y escribir su página en la historia de este su país, México, ya lo demostraron con #Soy132 y con #S19, y parafraseamos a German Dehesa, diciéndoles: “Hoy toca”.