En un mercado cada vez más competitivo, las marcas de lujo buscan nuevas formas de conectar con sus audiencias a través de experiencias inmersivas. Johnnie Walker Black Ruby, la última edición de lujo del legendario Scotch whisky, ha dado un paso adelante con su nueva iniciativa “Where is the Ruby?”. Esta dinámica no solo ofrece una experiencia de alta coctelería en la Ciudad de México, sino que también fusiona elementos de exclusividad, moda y competencia para atraer a su público objetivo.
El lanzamiento de “Where is the Ruby?” invita a los consumidores a una emocionante búsqueda del tesoro en la que deben visitar algunos de los bares más emblemáticos de la capital mexicana. Entre los seleccionados se encuentran lugares icónicos como Bar Brujas, Bijou, Xaman, Antesala y Casa Prunes. Los participantes deben degustar un cóctel exclusivo elaborado con Johnnie Walker Black Ruby y registrar su experiencia en redes sociales, compitiendo por un premio excepcional: un rubí auténtico de 9 quilates.
La búsqueda del lujo: una tendencia creciente
Esta estrategia de Johnnie Walker Black Ruby no solo apunta a atraer a los entusiastas del whisky, sino también a consumidores con una afinidad por el lujo y la moda. La entrega del rubí se realizará durante el Mercedes Benz Fashion Week México, un evento de gran renombre en el país, del cual la marca es patrocinador oficial. Al alinearse con eventos de alta moda, la marca refuerza su imagen de exclusividad y sofisticación, posicionándose más allá de un producto, como un estilo de vida.
Un caso similar de marketing experiencial es el de la marca automotriz Tesla, que organizó recorridos privados en sus autos eléctricos para potenciales clientes, donde los participantes no solo podían probar los vehículos, sino también acceder a eventos exclusivos con líderes de la industria tecnológica. Este tipo de experiencias permiten que las marcas generen una conexión más profunda con su audiencia, trascendiendo el producto y creando un lazo emocional con los consumidores.