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Se estima que en el mundo hay 237 millones de hombres y 46 millones de mujeres que padecen trastornos por consumo de alcohol.
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En 2016 murieron más de 3 millones de personas a consecuencia del consumo nocivo de alcohol.
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Se estima que hay 2 mil 300 millones de bebedores en el mundo.
Cada vez más los gobiernos del mundo están recurriendo al uso de campañas polémicas con el fin solucionar una problemática en su población o nacionalidad. Recientemente, se dio a conocer que la Agencia Tributaria de Japón ha abierto un concurso para aportar ideas de negocio, a fin de promover que los jóvenes beban más alcohol, dado que a partir de la pandemia ha habido un importante descenso de consumo y la consiguiente caída de la recaudación fiscal por este rubro.
No es secreto para nadie que el consumo del alcohol ocupa el tercer lugar entre los principales factores de riesgo de muerte prematura y discapacidad a nivel mundial, según datos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Asimismo, el organismo detalla que se estima que, en el año 2004 murieron en el mundo aproximadamente 2.5 millones de personas, incluidos 320 mil jóvenes de 15 a 29 años, por causas relacionadas con el consumo de alcohol.
Ante este producto que puede ser nocivo para la salud, en todos los países del mundo las bebidas alcohólicas pagan un impuesto dependiendo del grado de alcohol que manejen. Por ejemplo, en México, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) obtiene ingresos gracias a los impuestos que se aplican a bebidas azucaradas, bebidas alcohólicas, cigarros, alimentos de alto contenido calórico y gasolinas, lo que quiere decir que el gobierno recauda recursos por productos que pueden ser dañinos a la salud.
Según datos del SAT, en 2022, este monto se ajustó hasta 7.37 por ciento por la inflación. Cifras publicadas por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público muestran que en el primer cuatrimestre del año, la recaudación por el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) en este tipo de productos fue de 62,032 millones de pesos mexicanos.
Japón quiere que sus jóvenes beban más alcohol
Como una estrategia para aumentar las ganancias del IEPS, la Agencia Tributaria de Japón ha abierto un concurso para aportar ideas de negocio a fin de promover que los jóvenes beban más alcohol, dado que a partir de la pandemia ha habido un importante descenso de consumo y la consiguiente caída de la recaudación fiscal.
Según se explica en su página web, la campaña fue bautizada “Sake viva!” e invita a enviar propuestas destinadas a “revitalizar la industria de las bebidas alcohólicas y solucionar sus problemas”.
Asimismo, explican que el objetivo de la campaña es “incrementar el conocimiento entre la población sobre el sector de las bebidas alcohólicas, que está atravesando dificultades debido al Covid-19 y a la baja tasa de natalidad, que conlleva que haya menos consumidores”.
Un portavoz de la Agencia Tributaria de Japón, destacó que este organismo también trabaja para apoyar a la industria alcohólica nacional a promover la exportación de productos como el sake (licor de arroz), “que son una parte relevante de la cultura y la tradición de Japón”.
Durante la pandemia del Covid-19 muchos países del mundo vieron disminuidos este tipo e impuestos, pues en Japón la recaudación de los impuestos sobre el alcohol disminuyó 110 mil millones de yenes (811 millones de dólares) en el ejercicio fiscal 2020, lo que supone la mayor caída en 31 años, según datos de la Agencia Tributaria.
En ese mismo orden, otros datos oficiales de resultados de empresas japonesas del sector muestran un descenso de mercado de las ventas de bebidas alcohólicas, que se presenta por la tendencia alcista de bebidas sin alcohol.
Ante la campaña “Sake viva!”, los japoneses la han criticado en las redes sociales por estar promoviendo hábitos poco saludables. Por lo que el portavoz señaló que la Agencia Tributaria “no busca que haya consumo excesivo de alcohol y también trabaja para educar a los jóvenes para un consumo moderado”.
A pesar de ser criticada, la campaña de la Agencia Tributaria invita a enviar ideas “para impulsar nuevos servicios y métodos para estimular el consumo de alcohol entre los jóvenes, proponer productos basados en los nuevos estilos de vida y establecer métodos innovadores de distribución basados en la inteligencia artificial o el metaverso”.
En definitiva, el uso de estrategias de la mercadotecnia son usadas a diario para promover causas buenas o malas en todo el mundo.
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