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La vida nocturna es una apuesta cada vez más afincada en el mercado, por la trascendencia del venue y de los eventos que se van consolidando en el segmento.
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Invertir en entretenimiento yo se ha vuelto tremendamente novedoso, por las pautas creativas con que se sigue segmentando el mercado.
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La acción de Jägermeister emula la de otras marcas como Vans, que también han apostado por artistas en su fórmula de contenido.
La noche ha sido por décadas el mayor detonador del mercado de venues, puntos de venta como centros nocturnos y un mercado de entretenimiento que se ha consolidado con gran éxito, por la demanda que hay de la audiencia acostumbrada a esta escena y no solo eso, por la capacidad de crecer negocios que es interesante en este horario en que se mueven un importante volumen de productos como alcohol, llevando a marcas como Jägermeister a cambiar la estrategia de inversión en publicidad y apostar ya no por pautas tradicionales, ahora por elementos que se han convertido en recursos pensados en el mercado, donde se han establecido actividades de valor en consumo a partir de las experiencias, como Vans lo hizo con una plataforma musical, por ejemplo. Prueba de ello han sido las tareas que se han pautado en el mercado del entretenimiento, con recursos que son torales en el entendimiento del mercado y lo más importante, que definen ejercicios creativos de peso ante el consumidor.
La industria nocturna
El papel de la escena nocturna se ha consolidado a partir de recursos estratégicos, que siguen una norma clave, que es la de entender lo que sí y lo que no debe de marchar en un negocio.
Debido a esta oportunidad que encuentra el segmento de los patrocinios, no es casual esta apuesta, pues si vemos la proyección del Compendio Estadístico del Turismo en México 2020, en México había un estimado, tan solo durante 2020, de mil siete centros nocturnos en el país.
“La cantidad de clubes nocturnos en México muestra una tendencia general a la baja, pasando de casi mil 400 en 2010 a poco más de mil en 2020. En contraste, la cantidad de bares en México creció aproximadamente 70 por ciento entre el primer y el segundo semestre. de la década pasada”, explicó Ana M López, especialista en las fuentes de turismo en Statista.
Hay entonces una clara afinidad por el espectáculo y en esa medida es que se han dado fenómenos como una marca de zapatos con una plataforma llamada Channel 99 en la que apuesta por artistas emergentes, para generar contenido, llevando el pretexto de la creación a un nivel único: el de comunicación de marca mediante la creatividad.
Con este conjunto de elementos es que se han impuesto recursos que llaman la atención en el mercado, a partir de ideas que logran establecer acciones donde el entretenimiento ya pauta ante el consumidor. De hecho basta con ver las cifras del tipo de publicidad que los consumidores esperan de las marcas y encontramos un dato de MarketingCharts advierte que la efectividad de los eventos en persona fue considerada como muy alta por un 44 por ciento de personas entrevistadas.
Hay un elemento diferenciado en el mercado, que nos habla de tareas valiosas que se están asumiendo en la creación de contenidos, en especial la apuesta por el entretenimiento que están evolucionando las experiencias con un sentido comercial como la pauta Jägermeister Night Embassy que se implementó en Brasil y que los creativos de la marca argumentaron, se ideó porque “el Jägermeister debe el éxito de su bebida al público de la noche, por lo que tenemos, como parte de nuestra historia, que hacer de este entorno lugar que refuerce las identidades de cada pueblo, con la seguridad de que ejercerán sus experiencias plenamente”, explican del concepto al que han sumado a artistas como el mexicano “Pahua”, especializado en mezclar el folclor mexicano con la música electrónica, lo-fi y letras inspiradoras.
Ests acciones nos demuestran lo importante de las experiencias en publicidad y cómo la cercanía con el consumidor en el lugar común donde consume las marcas habitualmente es el mejor recurso de acercamiento.
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