Si bien la vacuna de AstraZeneca se ubica como una de las más reconocidas y más distribuidas en todo el mundo, lo cierto es que ahora este fármaco se ha puesto en el ojo del huracán luego de que tres países decidieran suspender la aplicación de dicha vacuna por un posible riesgo para la salud.
Este jueves, se dio a conocer que Islandia, Dinamarca y Noruega frenarían la inoculación con la vacuna creada en colaboración con la Universidad de Oxford hasta que la Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés) aclare si dicho medicamento tiene relación con el reporte de diversos casos de trombos en pacientes que han recibido esta vacuna en distintos países la de Unión Europea.
Los hechos
De manera puntual, desde Copenhague han anunciado que la vacunación se suspenderá cuando menos durante los próximos 14 días, mientras que desde Oslo no han dado alguna fecha en concreto ya que esperarán a que haya “más información”, según un portavoz de la Agencia de Salud Pública.
“Como medida de precaución, las autoridades sanitarias han suspendido la vacunación de AstraZeneca tras una señal de un posible efecto secundario grave en forma de coágulos de sangre mortales. Actualmente no es posible concluir si existe una conexión (con la vacuna). Actuamos temprano, (el caso)debe ser investigado a fondo”, destacó vía Twitter el ministro de Sanidad danés, Magnus Heunicke.
Horas después, un portavoz del Instituto Noruego para la Salud Pública (FHI), confirmó mediante un correo electrónico la suspensión de la vacuna de AstraZeneca, decisión a la que se sumó Islandia.
Aunque por el momento es imposible determinar si en realidad existe una relación entre la vacuna y los casos de trombos, lo cierto es que el crecimiento de los casos de este padecimiento en pacientes que han recibido la vacuna ha prendido todas las alertas.
En total, 142 mil 102 personas han sido vacunadas en Dinamarca con la dosis de AstraZeneca. En Noruega, 121 mil 820 personas han recibido este fármaco, que se suspende “hasta nuevo aviso”, según un comunicado, mientras que en Islandia ya se había inmunizado a 9mil personas con esta vacuna, según la radiotelevisión pública, RUV.
La respuesta de la marca
Aunque los casos parecen mínimos, lo cierto es que estas decisiones e traducen en un problema de acreditación y confianza alrededor de la mencionada vacuna.
Hasta el pasado 9 de marzo, se habían notificado apenas 22 casos de episodios tromboembólicos entre los tres millones de personas vacunadas con el medicamento de AstraZeneca en la Unión Europea, según el diario El País.
No obstante, y ante el revuelo causado, AstraZeneca se ha procurado al respecto al indicar que conoce de manera oficial la decisión, cuando menos, del gobierno danés y considera que “no es apropiado” comentar sobre “casos individuales específicos”, según el diario Jyllands-Posten.
En un comunicado, la marca ha indicado que “la seguridad del paciente es una de las principales prioridades de AstraZeneca. Las autoridades tienen estándares claros y estrictos de eficacia y seguridad al aprobar cualquier medicamento nuevo, y esto también incluye la vacuna covid-19 de AstraZeneca. La seguridad de esta vacuna se ha estudiado ampliamente en los ensayos clínicos de Fase 3 y los datos revisados por pares confirman que la vacuna en general fue bien tolerada“.
Lo cierto es a pesar de estas aclaraciones cinco países europeos más (Austria, Letonia, Estonia, Lituania y Luxemburgo) ya habían suspendido la administración de un lote, al tiempo que Italia se sumó a la decisión, luego de que las autoridades austriacas registraran dos casos de trombos graves tras la vacunación.