- La nombrada cónsul de México en Estambul, Isabel Arvide se ha convertido en todo lo que la 4T pregona no querer ser.
- Su comportamiento, ha puesto en jaque la imagen de austeridad y cercanía con el pueblo que ha construido la 4T en estos años.
- La cónsul ha hecho declaraciones desafortunadas que no han sido bien recibidas en el ámbito político, mediático y tampoco por la población que en este momento vive el proceso electoral en México.
Si bien la nombrada cónsul de México en Estambul, Isabel Arvide, no se encuentra en este momento con la intención de hacerse con otro cargo público por elección, sí ha resultado ser un problema para el movimiento encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), conocido como la cuarta transformación o 4T, ¿por qué? Bueno, resulta que la imagen que se ha dado a este compendio de acciones políticas, tiene que ver con la austeridad, la cercanía con la población y el hecho de poner “al pueblo sobre todas las cosas”, mandamientos que la funcionaria no parece seguir y que han sido permitidos por el gobierno de AMLO.
La funcionaria entró en la conversación de los usuarios de redes sociales la tarde del domingo, cuando fue captada viajando en primera clase y luego de ser interrogada, respondió que “era culpa de los periodistas que habían llenado el avión en la clase turística”. El comentario que no fue bien recibido y se viralizó entre algunos usuarios de Twitter y Facebook, generó todo tipo de comentarios en forma de críticas hacia el comportamiento de la cónsul.
Que manera de contestar de la Cónsul de México en Estambul Isabel Arvide.
Ahí está la respuesta al periodista, su experiencia y conocimiento en diplomacia es nula, es más ni sentido común tiene #VotaParaBotarlos https://t.co/3LlKldd9IR
— EM GY EM #WonderWoman ???? ?? (@ANAIRAM76) May 2, 2021
Luego, al ser interrogada durante la misma entrevista improvisada por su experiencia diplomática, contestó que quien la había nombrado había sido el presidente Andrés Manuel López Obrador.
“A mí me nombró el presidente. ¿Por qué me nombró el presidente? Porque le dio su gana nombrarme, pregúntaselo tú a él (…) Son (decisiones) totalmente del presidente (…) Lee las leyes, lee la Constitución, es una decisión del presidente, pregúntele a él, yo creo que lo ha discutido varias veces, ¿no lo ha respondido? Yo creo que sí, pero es una buena oportunidad, pregúntenle por qué me nombró”, subrayó.
Además, sostuvo que aceptó el puesto “porque al presidente no se le dice que no”.
El evento, posicionó rápidamente tendencias que hasta este lunes han trascendido, como “Estambul” o “Isabel Arvide”
Isabel Arvide: daño a la imagen política de la 4T
Así mientras la 4T de AMLO vive un año electoral de altibajos debido a diversos factores, la cónsul llega para coronar una serie de eventos desafortunados que han puesto en tela de juicio a todo el movimiento encabezado por los morenistas. Y es que, es cierto que la funcionaria no se encuentra disputando una gubernatura o senaduría o diputación, pero al haber obtenido su cuota burocrática por instrucciones del presidente, sí daña la imagen política que desea proyectar el movimiento durante esta etapa de campañas electorales.
Isabel Arvide es otro ejemplo del cinismo, ineficacia y doble moral del gobierno. Viajó a México en asiento de lujo y se trasladó en una camioneta que nada tiene que ver con la austeridad. Pero además acepta no tener idea del cargo que desempeña.
Vía: @gasparvela pic.twitter.com/NCbyzEDvVA
— Marco Levario Turcott (@Arouet_V) May 3, 2021
Así lo evidencian los conceptos básicos de imagen política a los que podemos remontarnos, “Se trata de una imagen que se construye sobre la base de determinadas características o atributos, tanto de carácter emocional –aspectos que humanizan la figura del político- como de carácter cognitivo -aspectos que se centran en los aspectos a través de los cuales se puede evaluar racionalmente la actuación y cualidades del político-. “, publica la doctora Rocío Zamora, de la Universidad de Murcia en un artículo que se puede consultar aquí.
Cierto es que en este momento, como ya se aclaró en párrafos anteriores, no se habla sobre la formación de imagen política de un candidato a algún cargo de elección popular, pero sí de un movimiento que durante las presentes campañas políticas intenta mantener el poder de la mano de los cargos que están por ocuparse ¿debería AMLO preocuparse por la actitud de la funcionaria?, es probable, pero principalmente y como actor externo a estas campañas, debería cuidar la imagen de su gestión que según las más recientes encuestas se ha visto mermada, quizá en cierta medida, por la actitud de personajes como Isabel Arvide.
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