Recientemente, uno de los fondos inversionistas mĂĄs grandes de Uber, Benchmark, demandĂł al ex CEO de la compañĂa, Travis Kalanick, por supuestamente mentir al fondo sobre los problemas de acoso sexual al interior de la compañĂa y otros conflictos legales.
Lo que se disputa como un control total de la compañĂa ahora parece recrudecerse, ya que el mismo fondo de inversiĂłn estĂĄ bloqueando los intentos de otros inversores de vender sus acciones de Uber, ya que Benchmark es poseedora del 20 por ciento de las acciones de la compañĂa.
SegĂșn Benchmark, el bloqueo continuarĂĄ hasta que se hayan eliminado tres nuevos puestos directivos, incluyendo el que ocupĂł el ex CEO, Travis Kalanick. De no hacerlo, el fondo de inversiĂłn bloquearĂa cualquier acuerdo de inversiĂłn externa de Uber.
Lo que se cree es la batalla por la direcciĂłn de Uber ha impedido que la compañĂa tenga un nuevo CEO, pero concretamente ha impedido que Softbank, Dragoneer Investment Group y Shervin Pishevar hagan propuestas de inyecciĂłn de capital.
Aunque Kalanick se retirĂł del puesto hace algunas semanas, aĂșn permanecen vacantes 2 de 3 puestos, es decir, Benchmark quiere despedir a esa persona y eliminar los tres puestos, y con ello evitar el regreso de Travis y de cualquiera de sus allegados.
Cabe recordar que Benchmark fue uno de los primeros inversionistas de Uber, participanto en tres rondas de financiamiento desde el 2011. SegĂșn ellos, su inversiĂłn inicial de 27 millones de dĂłlares se ha traducido en una participaciĂłn del 13 por ciento de la compañĂa, valorada actualmente en casi 70 mil millones de dĂłlares, asĂ como el 20 por ciento de sus derechos de voto, mientras Kalanick, aunque estĂ© retirado, aĂșn posee el 10 por ciento de las acciones y el 16 por ciento de los derechos de voto.