México es uno de los países emergentes más abiertos a la inversión Extranjera Directa (IED), según el Informe de Inversión Mundial 2016 publicado por la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (CNUCYD).
Los flujos de IED en el país fluctúan mucho dependiendo de la llegada o salida de grandes grupos internacionales. Tras alcanzar los 33 mil millones de USD en 2015, los flujos de IED en México disminuyeron a 26 mil millones de USD en 2016.
En el año 2012, los 4 mil 372.4 millones de dólares invertidos en México, se canalizaron a la industrias de la siguiente forma: manufacturera (36.8 por ciento), servicios financieros y de seguros (22.1 por ciento), comercio (12.8 por ciento), servicios inmobiliarios (6.8 por ciento), servicios profesionales científicos y técnicos (6.7 por ciento) y otros sectores (14.8 por ciento).
Cinco años después, en 2017, México captó 29 mil 695 millones de dólares en Inversión Extranjera Directa. Este monto superó el pronóstico de los analistas, de 25 mil 574 millones de dólares, según la última estimación de la encuesta del Banco de México (Banxico).
Esto representó un incremento de 11.1 por ciento con respecto al año 2016, de acuerdo con datos de la Secretaría de Economía. Estados Unidos fue el mayor inversionista. Dicho país, Canadá y México, son socios en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), que actualmente se encuentra bajo el estatus de “renegociando”.
Estados Unidos, realizó en 2017 nuevas inversiones equivalentes a 3 mil 904.5 millones de dólares, así como reinversiones por 5 mil 578.8 millones de dólares; por su parte España, reinvirtió en México, mil 454.9 millones de dólares, y realizó nuevas inversiones por la cantidad de mil 152.4 millones de dólares.