Hay varios elementos que las personas pueden tomar en cuenta al crear o modificar su propio portafolio. Por ejemplo, qué industrias tienen el futuro más prometedor en el largo plazo. O bien, las posibilidades de rendimiento a corto o largo plazo, así como lo que hacen los demás agentes del mercado. Pero también hay quienes están considerando ideas más personales a la hora de elegir sus activos. Un ejemplo de esas tendencias está en la llamada inversión ética.
¿Qué significa este concepto? Básicamente, se trata de comprar acciones, bienes, monedas y otros activos basándose en un código moral personal. La inversión ética no solo se fije en qué compañías o recursos podrían maximizar el rendimiento en el corto o largo plazo. También ve cuáles agentes están realizando un cambio positivo en su entorno. Por supuesto, esto significa que las personas, al hacer crecer su patrimonio, indirectamente trabajan por un mundo mejor.
De acuerdo con Amundi, en el transcurso de los últimos 10 años, las empresas que invierten en factores medioamientales, sociales y de gobierno corporativo (ESG) o Responsabilidad Social Corporativa (CSR) tuvieron un rendimiento promedio superior al resto del mercado. The Motley Fool también hace referencia a varios expertos que refuerzan esta teoría. Entre las marcas más destacadas, según Investors se cuentan EW, EQUIX, PLD, EME, CDNS y NRC.
Cómo practicar la inversión ética
Es importante decir que no hay una sola forma de adoptar ese estilo de crecimiento financiero. De hecho, la inversión ética tiene un sinfín de vertientes. Puede centrarse en marcas con una responsabilidad social, en iniciativas sustentables, enfocadas al medio ambiente, proyectos de impacto o corporaciones que intenten abarcarlo todo. También hay quienes deciden crear un portafolio en donde excluyen a todas aquellas compañías que no poseen un programa claro.
Otros prefieren practicar la inversión ética solo excluyendo activos que explícitamente tienen un impacto negativo según sus ideales. Lo importante a resaltar es que este tipo de portafolio no solo tiene un rendimiento similar al de otras configuraciones más tradicionales. En datos de Morningstar, el 66 por ciento de los fondos sustentables tuvieron un mejor rendimiento que sus contrapartes convencionales en 2019. Así, hay una posibilidad de crecimiento muy importante.
¿Cómo pueden las personas crear su propio portafolio de inversión ética? En plataformas al estilo de eToro, los individuos no solo pueden diseñar sus propias distribuciones de activos, para elegir exactamente en qué compañías poner su patrimonio. También cuenta con datos, noticias e información oportuna de cada uno de los mercados en la plataforma. Así, la gente podrá detectar con mayor facilidad qué marcas y sectores están cumpliendo sus estándares.
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