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La fragilidad tecnológica es un tema que se ha cuestionado en diversas ocasiones, por la necesidad que los usuarios tienen de estos dispositivos.
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El uso diario de la tecnología ha abierto la oportunidad para ciertas marcas de crear productos que han logrado mantenerse relevantes a través de la usabilidad que ofrecen sus dispositivos.
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Un iPad Pro frágil se ha convertido en el mejor ejemplo de lo necesario que es repensar los materiales que componen estos dispositivos.
En diversas ocasiones hemos escuchado el costo de cada uno de los componentes de un iPhone y esto se debe a la relevancia que el dispositivo tiene en el mercado de smartphones.
Cada uno de estos componentes juega un papel definitivo en el resto de los dispositivos móviles, cuando se trata de entender qué elementos marcan la diferencia al momento de competir y la innovación que aparentemente ofrecen en la experiencia a los usuarios.
Un youtuber ha revelado lo frágil que es la nueva iPad Pro y la serie de críticas que se han despertado tras revelar el incidente nos recuerdan lo importante que es la innovación pensada en la experiencia de usuario con que deben impactar a través de los recursos que ofrecen.
Zack Nelson demostró a través de su canal de Youtube, JerryRigEverything, lo fácil que es doblar una iPad Pro, uno de los recientes lanzamientos de Apple.
De esta forma es que la cuestión sobre innovación debe de pensarse, desde una perspectiva que implica aspectos que descubren lo relevante que son el diseño y los componentes de un producto en el día a día del consumidor.
Esta ha sido la reciente apuesta de Google, luego de que Ivy Ross, la vicepresidenta de diseño de Google, aseguró a medios especializados estar trabajando en la identidad en hardware con que cuenta la compañía, con la que se logra ser reconocida en el mercado.
Hardware identity
La identidad a través de los objetos físicos es una estrategia donde las marcas tecnológicas invierten cada vez más, pues es con base en este trabajo, que queda determinado el rol que juegan las firmas en la vida diaria de los consumidores y el interés que cobran cuando se determinan a empatar con los intereses del mercado, cada vez más dependiente de la tecnología y los dispositivos a través de los cuales accede a ella.