La industria global de bienes de consumo ha enfrentado tiempos difíciles durante los últimos años, incluso en las regiones de más rápido crecimiento del planeta; el rendimiento de este indicador se ha mantenido bajo un incremento perezoso del 1.9 por ciento durante 2017.
El mayor colaborador de los bienes de consumo de rápido movimiento, Estados Unidos, registró un alza del 0.5 por ciento, mientras que en América Latina creció debido a altas tasas de inflación al tiempo que animó la confianza del consumidor.
Sin embargo, diversas marcas han resistido la tendencia y el crecimiento en contra de diversos factores. De tal forma que Kantar WorldPanel definió que las marcas locales, es decir aquellas que tienen presencia en un mercado único, en comparación de marcas regionales están presentes en dos o más mercados, y las marcas globales, aquellas qu se cruzan en al menos dos continentes.
La continua marcha de marcas locales ha derivado en una tendencia de lo local, jugadores que ganan frente a la competencia global en los últimos años. Las marcas locales tienden a adaptarse a necesidades y tendencias del mercado, así como mayores ganancias de penetración vienen más fácilmente. Sin embargo, las marcas globales se las arreglan para lograr rendimientos en diversos países y continentes, lo que los vuelven menos ágiles.
Asimismo, el sector de una marca local también influye en la elección. Compradores en general valoran las marcas de un solo territorio ya que se pueden adquirir a precios asequibles; por lo que estas marcas también tienden a mejorar el vínculo con el cliente. Si bien, a primera vista parece que no representan una amenaza para los jugadores globales, las firmas locales crecen a más del doble en sectores como el de hogar, así como belleza y aseo personal.