ACTUALIZACIÓN: Se agrega la infografía, que no se había anexado inicialmente
Por años, la protección informática tendría que haber sido un tema central para las compañías en todo el mundo. Sin embargo, a raíz de la crisis sanitaria de la COVID-19, la ciberseguridad realmente tomó un papel central en las prioridades empresariales. En parte, por su importancia en industrias en crecimiento, como la banca digital. Pero también por el simple hecho que, en muchas zonas del mundo, los ciberataques se multiplicaron sustancialmente durante el 2020.
Aún si las condiciones hacen más urgente que nunca prestar atención a la ciberseguridad, el tema sigue siendo tan importante como siempre. Las compañías necesitan invertir en estos sistemas para proteger su información de agentes maliciosos, que podrían secuestrarla para pedir un rescate o simplemente hacer daño. Y, en una época donde la privacidad está muy presente en las preocupaciones de los usuarios, es un componente crucial de la confianza.
El estado de la ciberseguridad en 2020
Statista recientemente lanzó un reporte muy interesante sobre el estado de la industria para este 2020. Entre los datos más relevantes que genera está la confirmación de que todavía hay una enorme brecha de talento para ciberseguridad en todo el mundo. América Latina de hecho es la segunda región donde hacen falta más profesionales capacitados, con la falta de 600 mil expertos. Por supuesto, es nada comparado con la deuda de 2.6 millones de Asia-Pacífico.
También se muestra que el gasto en ciberseguridad realmente ha seguido al alza, aunque no con la velocidad de años anteriores. Más de la mitad del gasto internacional de empresas e instituciones en este sector se realiza en el sub-segmento de Servicios de Seguridad. En un lejano segundo lugar está la protección de infraestructura. También es llamativo ver que, en anti-malware para Windows, los proveedores más poderosos son Symantec, AVAST y ESET.
En lo que se refiere a tecnologías innovadoras de ciberseguridad, se pueden identificar una serie de deficiencias. La amplia mayoría de las empresas a escala global, 64 por ciento, ya tienen implementados software anti-malware. Pero menos de la mitad tienen programas que activamente escaneen sus sistemas para detectar vulnerabilidades o probar la fortaleza de sus defensas. ¿Te interesa conocer más sobre este mercado? Entonces no te pierdas la infografía: