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EA es considerada una de las empresas más grandes e influyentes de la industria del gaming, con franquicias como FIFA, Battlefield y The Sims
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De acuerdo con la compañía, está trabajando con la autoridades federales para darle el adecuado seguimiento a la filtración de datos
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La compañía se une a varias empresas de EEUU, como JBS y Colonial Pipeline, que han sido víctimas de hackers recientemente
Un grupo de hackers podría poner en jaque la integridad de la saga FIFA. De acuerdo con Reuters, Electronic Arts (EA) acaba de informar de un ciberataque contra su negocio. Esta brecha de información habría vulnerado alrededor de 780 gigabytes de datos, que ya se están ofreciendo en foros de hackers especializados. Las acciones del estudio de videojuegos se desplomaron en un 2.4 por ciento luego que se dio a conocer el incidente de ciberseguridad.
Según la misma EA, los hackers no accedieron “a datos de los jugadores, ni tenemos razón para creer que hay algún riesgo a la privacidad de los usuarios”. Según Motherboard, entre la información que fue robada se encuentra código fuente y herramientas internas de la empresa. Según publicaciones de estos agentes maliciosos, los datos robados les permitirían “explotar completamente todos los servicios” de la compañía. También dieron algunos detalles extra.
En teoría, los hackers tienen el código fuente de FIFA 21, así como de sus servidores para las partidas en línea. También obtuvieron el código fuente y herramientas para el motor Frostbite, en el que están construidos varios títulos de EA, entre ellos Battlefield. La compañía dijo al medio de Vice que el robo de las herramientas y el código fuente tendría un “efecto limitado” en su negocio. Además, apuntaron que ya han hecho mejoras a sus medidas de seguridad.
Una lección de ciberseguridad
La brecha en EA es solo la más reciente en una serie de ofensivas de agentes maliciosos a empresas de Estados Unidos (EEUU) y de carácter global. Y no solo están afectando a marcas de entretenimiento o tecnología. De acuerdo con The Daily Swig, el medio Al Jazeera también tuvo que rechazar una serie de ofensivas a su red que intentaban crear disrupciones en su operación. Sin embargo, cabe destacar que esta situación no es nueva para el mercado.
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Prácticamente desde el nacimiento del internet se detectan regularmente ataques contra sistemas informáticos como el que acaba de sufrir EA. No solo eso, sino que la tendencia muestra que han ido aumentando en gravedad y frecuencia. Un reporte de The Verge muestra que, en 2011, se registraron relativamente pocos incidentes, con pocas personas afectadas. Pero en 2020 y 2021, cada pocas semanas se dan a conocer nuevos casos consistentemente.
Estos casos deberían ser suficientes para que las empresas tomen medidas de ciberseguridad mucho más agresivas. Pero todo lo contrario. Los incidentes que han sufrido EA y otras no han convencido a muchas marcas de poner mucha más atención en proteger sus negocios de los agentes digitales maliciosos. De acuerdo con Forbes, solo 22 por ciento de todos los negocios tienen la confianza que podrían responder a la intervención de un hacker, si llega a ser el caso.
Casos paralelos a EA
Hay varias empresas que han sido víctimas de ataques de agentes maliciosos, y cuyos casos se han vuelto tan o más públicos que el de EA. Por ejemplo, en enero del año pasado, se dio a conocer que un sitio para adultos sufrió una brecha de seguridad que resultó en la filtración de un millón de perfiles. Entre los datos que se vulneraron se cuentan documentos, fotos, códigos postales e identificaciones oficiales que podrían usarse para encontrar a las modelos del sitio.
Meses después, en octubre de 2020, se dio a conocer el caso de una brecha masiva de datos de una compañía de cámaras de seguridad. Al contrario del caso de EA, sí se vulneraron los archivos personales de los usuarios. De hecho, algunos de los videos incluso fueron colocados en sitios para adultos. Incluso se les vendía en bundles en internet, un paquete por el que al menos 70 personas, cuando se reportó este hecho, habrían decidido pagar a los hackers.