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El coronavirus está alterando el comercio mundial por varias razones convergentes
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Las marcas de lujo son las primeras afectadas
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¿Cuánto tiempo pasará hasta que el golpe sea letal?
Era diciembre de 2019 y el sector minorista mundial estaba preocupado por la guerra comercial entre China y los Estados Unidos y por cómo resolver el nuevo escenario instalado a partir de la masificación de la venta online.
Pasaron sólo dos meses y la realidad del retail ha mutado de una manera preocupante.
¿Por qué? Porque apareció el coronavirus en Wuhan.
Ahora, los minoristas se enfrentan a graves problemas de cierres temporales debido al brote, a lo que se suma que muchos compradores ahora dudan en salir de sus hogares.
A esto se adiciona el problema de la escasez de insumos, a partir de que las fábricas chinas cerraron o suspendieron actividades durante casi todo febrero.
El brote está concentrado en gran medida en los principales centros comerciales de China continental y, ahora, también en Irán, Italia y Corea del Sur. También llegó a España, Alemania e incluso a Brasil y México.
En algunos de esos lugares, el tema ya ha llevado a las principales empresas a reducir sus expectativas de ingresos.
Además, muchos minoristas, particularmente los del sector de lujo, advierten otros efectos negativos del brote, como la falta de turistas chinos, grandes consumidores de esas marcas.
El analista de Forrester, Xiaofeng Wang, le dijo a Retail Gazette que el sector global de lujo es “muy dependiente” del gasto de los compradores chinos.
Los expertos de la industria estiman que los consumidores del gigante de Asia gastaron US$ 102 mil millones en marcas de lujo en 2019. Esto es un tercio de las ventas minoristas mundiales en ese segmento.
En el Reino Unido, por ejemplo, Burberry les advirtió a los inversores que el brote estaba teniendo un “efecto negativo” en la demanda. Lo mismo dijo el propietario de Michael Kors, Capri Holdings, que advirtió que podría generar un impacto de US$ 100 millones en sus ingresos.
Esto está traccionando hacia abajo las bolsas mundiales. El FTSE 100 perdió US$ 56 mil millones el mes pasado después de que las marcas minoristas de lujo vieron caer sus acciones.
Mark Allen, estratega de Fitch, dijo al mismo medio que “con menos consumidores asiáticos dispuestos a viajar, estamos viendo menos ventas en las marcas de lujo”.
El coronavirus y el reemplazo de proveedores
Sin suficientes proveedores chinos, es probable que las marcas intenten reemplazarlos con insumos de sus respectivos países. El problema: los costos.
Esto generará un aumento de precios imposible de eludir.
De esta forma, aunque el impacto inmediato es para el retail en China, el coronavirus presenta un alto riesgo para los minoristas del mundo.
Shore Capital estima que la escasez de bienes podría comenzar a aparecer en Europa en las próximas seis semanas.
Transmisiones en vivo por el coronavirus
Volviendo a las marcas de lujo, muchas implementaron transmisiones en vivo de desfiles que se realizaron a puertas cerradas.
Por ejemplo, Giorgio Armani canceló su desfile de Milán y emitió el evento desde una sala de exposición vacía de compradores.
Gucci transmitió en vivo su desfile de colección de otoño/invierno usando Weibo, una de las plataformas de redes sociales más grandes de China.
Hasta el comercio electrónico se está viendo afectado. El gigante chino Alibaba advirtió la semana pasada que las interrupciones relacionadas con virus podrían afectar su crecimiento de ingresos en el trimestre.
El presidente ejecutivo, Daniel Zhang, habló de la demora en el regreso de los empleados en volver al trabajo y de las complicaciones de las empresas de logística.
Y no sólo las marcas de lujo sufren, Primark emitió una advertencia de problemas de escasez en algunas líneas de indumentaria por retrasos en las fábricas en China.
A pesar de la amenaza, dijo que no espera ningún “impacto a corto plazo” como resultado del brote.
Sin embargo, advirtió que estaba considerando trasladar algunas manufacturas a fábricas no chinas por el coronavirus.