Internacional.- Estamos tan acostumbrados a ver la realidad del mundo-Ā y lo peor de ella- que perdemos la capacidad de asombro. Un impactante comercial britĆ”nico, con mĆ”s de 19 millones de visitas en pocos dĆas, nos llama a tomar conciencia de lo que sucede mĆ”s allĆ” de nuestras fronteras. Pero no es el Ćŗnico.
El director y autorĀ britĆ”nico Martin Stirling acaba de lanzar una campaƱa solidaria ā ordenada por la organización internacional Salva a los NiƱos– para que el mundo tome conciencia de lo que sucede con los niƱos en Siria. Lo hace de una forma directa e impactante, que ha generado en pocos dĆas millones de visitas.
Su audiovisual, de minuto y medio, muestra los momentos mĆ”s felices de una pequeƱa de ocho aƱos y lo que podrĆa suceder en otro escenario. El trabajo realizado tiene una dinĆ”mica que no da respiro y que se basa sólo en imĆ”genes, haciĆ©ndolo aĆŗn mĆ”s efectivo.
āSalva a los niƱos, que no haya pĆ”nicoā dice la frase y luego viene el remezón de conciencia al enrostrarnos la realidad con la frase āel hecho de que no suceda aquĆ, no significa que no estĆ© sucediendoā.
Pero la organización no es la Ćŗnica. Unicef, desde su fundación, busca impactar al mundo con la realidad que viven los niƱos de diversas latitudes. La guerra, la pobreza, las malas polĆticas de paĆses en desarrollo y la ignorancia, forman generaciones que estĆ”n destinadas a seguir sufriendo situaciones lĆmite, al igual que sus padres y sus abuelos. En el Ćŗltimo comercial de UNICEF, las imĆ”genes conmueven y las cifras se convierten en personas de carne y hueso, chicos que relatan lo que viven, sus peores pesadillas.
La publicidad es una herramienta maravillosa, si por medio de ella, se puede conseguir que todos ganen. La publicidad puesta al servicio de lo social, puede hacer una gran diferencia para millones de niƱos y ser, como cualquier actividad creativa, un agente de cambio real.