Durante el año pasado, el 89 por ciento de los equipos estratégicos incrementaron sus inversiones en herramientas de analítica enfocadas a Big Data, con el fin de que el tratamiento de los datos resultara en insigths más predictivos y prescriptivos antes que descriptivos.
Es decir, que la data permita ir un paso más allá de lo que se puede hacer actualmente de una forma relativamente sencilla.
Una vez determinada esta relevancia de la data y que al final es la Inteligencia Artificial la que permite esta predictibilidad tan deseada por el estratega. La IA es clave en este sentido de poder prever lo que el consumidor quiere y busca cuando se acerca a una compañía.
En otro apartado, Zeus Portillo, CIO – Retailigent Media, explicó que “la tecnología nunca es el fin, si no el medio, hagamos lean marketing, que no es otra cosa que observar, implementar, aprender y modificar lo más rápido posible y eso es parte de lo que el IA permite. Así que el consejo es invertir en activos que les permitan generar Big Data y digitalizar el proceso de marketing porque solo así tendrán aprendizaje y control del consumidor para ser eficientes en las estrategias y toma de decisiones”.
Ya conociendo lo que se requiere, resulta mucho más sencillo ponerlo al alcance de su mano por medio de una estrategia de retail marketing. Esta, con la fuerza de IA da como resultado la suma correcta.
Esta suma deriva en tener un mapa preciso del consumidor, una guía con la que las compañías pueden contar en una industria tan compleja, pero la clave continúa siendo que ambas puedan complementarse.
Es por ello que el año pasado el mercado de la IA alcanzó un valor aproximado de 4 mil 65 millones de dólares, pero las previsiones tienen en cuenta que para 2025 registre un tamaño de 59 mil 748 millones de dólares, de acuerdo con proyecciones de Tractica.
Para 2020 el 85 por ciento de las interacciones con los clientes se gestionarán de forma artificial, según Gartner.
Las propias cifras muestran al estratega el panorama creciente de este segmento, por lo que el tema toma un sentido de garantía en cuanto a qué se debe invertir y cómo se desempeñarán las grandes compañías.
IA y retail marketing representan una fuerza conjunta que puede dar grandes resultados.