El high-involvement model o modelo de alta participación ayuda a identificar a los medios que dependen de un perfil activo de sus audiencias. Esto ocurre en los medios impresos donde es posible ver una participación de los lectores, que deben centrar su atención en la lectura.
Por ejemplo, esta estrategia ayuda a definir un mercado de usuarios de medios impresos, segmento que ha venido experimentando una baja al rededor del mundo, comparándose contra medios como la TV, los sitios web y en algunas regiones son incluso superados por las redes sociales, en aspectos como ser la principal fuente de noticias del consumidor.
Un estudio llevado a cabo por el Reuters Institute for the Study of Journalism encontró en 2015 que la relevancia de los medios impresos a nivel internacional declinó ante medios, entre ellos la TV, en países como Alemania Japón, Reino Unido y los Estados Unidos, donde dominó en el porcentaje de consumidores que la consideró como su principal fuente para obtener noticias.
En Brasil y los Estados Unidos, por ejemplo, las redes sociales superaron a los medios impresos como fuente para obtener noticias con un 10 y 11 por ciento, respectivamente, contra la preferencia de cuatro y cinco por ciento obtenida por los medios de papel.
Sin embargo, pese a estas expectativas en la inversión en publicidad dentro de los medios impresos, tomados de su mano se llevan a cabo una serie de estrategias que buscan aprovechar la oportunidad que plantea su naturaleza informativa.
Datos del Estudio de Revistas 2015 realizado por el Departamento de Investigación de Merca2.0 descubrieron que estos medios impresos destacaban entre la preferencia del consumidor por ser ejemplares que pueden ser conservado para el 42.5 por ciento de quienes respondieron la encuesta.
Para el 30 por ciento de los encuestados se trató de un medio de fácil lectura, mientras que un 9.2 por ciento reconoció que se trataba de un medio cuya ventaja es que el ejemplar era entregado en sus domicilios.