La pandemia del Covid-19 ha transformado de muchas maneras la forma en que convivimos, trabajamos, nos entretenemos y consumimos. Sus colosales efectos han impactado en el mundo para bien y para mal. Estamos viviendo ya lo que muchos llaman la “nueva normalidad”, con la implantación de nuevos hábitos y costumbres.

En el caso del consumo, se está haciendo evidente muy rápidamente, modificando y/o acelerando la forma en que nos comportamos y gastamos. En definitiva, no volverá a ser la misma.  Durante el 2021 nuestras vidas se irán ajustando a este nuevo estilo de vida y afectarán la forma en la que se desenvuelvan los consumidores.

Como años anteriores, Euromonitor International presentó las 10 Principales Tendencias Globales de Consumo para el 2021, donde afirma que a pesar de las dificultades que enfrentamos en el 2020, los consumidores no se rinden y continúan encontrando su voz e impulsando la idea de un mañana mejor.

El estudio identifica tendencias emergentes y de rápida evolución que se espera ganen terreno durante el año. Estas tendencias entregan información sobre los valores cambiantes del consumidor, explorando la forma en que se desplaza su comportamiento y cómo esto altera a los negocios a nivel global.

Algunas de estas disposiciones podrían adivinarse o aparentemente ser obvias, como una obsesión por la seguridad; el rol que la conveniencia tendrá en la decisión de compra; la búsqueda de espacios al aire libre que proporcionen bienestar mental y físico; administrar el tiempo en torno al trabajo, la familia, la vida social y personal se presenta tanto un reto, como una oportunidad; lo nuevos espacios de trabajo; optar por soluciones holísticas en lugar de tópicas para mantener la salud mental y el ahorro reflexivo, donde se priorizan los productos y servicios con valor agregado y orientados al bienestar.

Como mencionaba, algunos de estos comportamientos eran de alguna manera predecibles, por lo que no abundaré sobre ellos. Me parece qué en esta lista de diez, hay tres que merecen mayor atención, los clasificados como: reconstruyendo para mejor, los inquietos y rebeldes y, la realidad phygital.

Se dice que se nos está dando una oportunidad para ser mejores. Tanto los empleados, como los consumidores están exigiendo a las empresas un compromiso más social y comunitario, y menos enfocado al logro de utilidades. Proteger la salud, los intereses de la sociedad y del planeta, es la

nueva expectativa para reconstruir un mejor futuro. La reputación jugará un papel muy relevante en la decisión de compra, en las preferencias y las simpatías del consumidor.

Las empresas deben de actuar de manera más sostenible, transitando de una economía centrada en el volumen a una centrada en el valor. Las organizaciones deben de contribuir también hacia la lucha contra la desigualdad y el daño ambiental.

La siguiente tendencia viene muy ligada a la anterior: consumidores inquietos y revueltos. En los últimos años, la rabia hacia la clase gobernante ha ido en aumento en medio de un clima de creciente resentimiento y extremismo, lo que dio origen a esta la tendencia.

Haber padecido abusos y sentirse relegados, provocó que estos aficionados al autocuidado se rebelen y pongan en primer lugar sus propias necesidades y deseos. El 29 por ciento de los consumidores está involucrado activamente en temas políticos y sociales, por lo que las empresas y redes sociales deben trabajar juntos para asegurar que se comparta información puntual y relevante o correrán el riesgo de perder la confianza y la credibilidad. Un marketing más preciso en redes sociales y plataformas de entretenimiento será clave para las empresas en el 2021.

Finalmente, la realidad Phygital, un híbrido entre los mundos físico y virtual en que los consumidores pueden vivir, trabajar, comprar y jugar eficientemente tanto en persona como en línea. Los negocios integrarán los procesos virtuales a sus espacios físicos para dar a los consumidores que prefieren permanecer en casa, la comodidad de una aventura en el exterior.

Aportar experiencias virtuales en el hogar sigue siendo imperativo para impulsar las ventas del comercio electrónico y recopilar datos. Las marcas que brinden experiencias seguras y memorables por medio de diferentes métodos y plataformas desarrollarán clientes leales.

El documento concluye con la siguiente reflexión: “La flexibilidad, agilidad, transparencia y tecnología pavimentarán el camino. Con el aumento en la incertidumbre reestructurando el mundo, los negocios deben priorizar y reforzar las necesidades de consumo, ambientales y de seguridad para impulsar un futuro más brillante”. Al final, parece que la nueva normalidad será mejor de lo esperado.