Días atrás, la serie de televisión Roseanne regresó al aire después de más de veinte años y ahora con un mensaje a favor del presidente Donald Trump. El primer episodio fue un éxito rotundo y ABC ya aprobó una segunda temporada.
La comedia situacional Roseanne se transmitió en la televisión estadounidense entre 1988 y 1997. Contaba la historia de una familia de clase trabajadora y sus problemas del día a día.
Esta semana, Roseanne regresó a la TV y fue vista por más de 18 millones de televidentes, de acuerdo con datos de The Hill. El personaje interpretado por Roseanne Bar es abiertamente simpatizante del presidente Donald Trump, al igual que la actriz.
En el primer episodio de Roseanne, se hace una decena de chistes políticos en torno a los temas candentes en Estados Unidos, incluyendo una discusión con un personaje que caricaturiza a las simpatizantes de la lucha feminista.
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Según varios reportes, el presidente Trump llamó por teléfono a Roseanne Barr para felicitarla por el éxito del estreno de la comedia.
Este representa un parteaguas en la televisión estadounidense contemporánea. Históricamente, los shows de comedia que toman temas políticos son abiertamente liberales y simpatizantes de los demócratas y en el caso de Roseanne es una representación de la clase obrera que votó por Trump por la falta de trabajos adjudicada al Tratado de Libre Comercio de América del Norte.
Ademas, la serie podría ser la primera de varias que generen contenido en favor de Trump, algo que hasta el momento es exclusivo de la cadena de noticias Fox News.
