Hablemos de patrocinio deportivo

En el mundo del marketing deportivo, los patrocinios a figuras destacadas se han convertido en una estrategia clave para las marcas que buscan no sólo asociarse con el deporte, sino también fortalecer su presencia y conectar emocionalmente con los consumidores. Desde la legendaria alianza de Michael Jordan con Nike hasta la icónica colaboración de Lionel Messi con Adidas, exploremos qué implica para una marca apostar por patrocinios deportivos de gran envergadura.

Patrocinar a figuras deportivas de renombre aporta a las marcas un aura de credibilidad y éxito. Los logros y la excelencia de estos atletas se asocian directamente con la marca, creando una conexión emocional que va más allá de lo puramente comercial.

Y es que las estrellas deportivas tienen un alcance global incomparable. Su presencia en eventos, redes sociales y campañas publicitarias garantiza una visibilidad masiva para las marcas. El logo en la camiseta de un futbolista o las zapatillas de un jugador de baloncesto se convierten en símbolos reconocibles en todo el mundo.

Mientras que el respaldo de figuras deportivas influye directamente en las decisiones de compra de los consumidores. La admiración por un atleta se traduce en la elección de productos asociados a su imagen. Desde la elección de zapatillas hasta la preferencia por ciertos equipos, la influencia de las estrellas deportivas es un factor determinante.

Por ejemplo, la colaboración entre Michael Jordan y Nike es un hito en la historia de los patrocinios deportivos. La línea Air Jordan no sólo ha marcado tendencia en la moda deportiva, sino que ha consolidado a Nike como un referente en la industria, fusionando la excelencia atlética con el estilo de vida.

Actualmente esta marca paga 125 millones de dólares al año a la NBA por ser su principal patrocinador, mientras que su contrato de patrocinio con la NFL está firmado hasta el 2028 y hasta 2030 el de la MLB. En total, Nike tiene más de 650 acuerdos de patrocinio en más de 140 ligas deportivas, siendo la ciudad de Nueva York la que concentra la mayor parte con más de 75 patrocinios.