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La gripe aviar llega a producir una alta tasa de mortalidad en diferentes tipos de aves, de hasta 60 por ciento en algunas cepas.
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Productores de Sonora y NL ahora tienen que demostrar mediante pruebas oficiales, que sus productos están libres del virus.
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Se prevé escasez y encarecimiento del pollo y huevo, además del impacto inflacionario, en zonas conurbadas de estos estados.
Tres granjas avícolas de Sonora y Nuevo León entraron en cuarentena tras encontrarse un fuerte brote de gripe aviar, el cual, aunado a la inflación, pone en alerta al mercado de huevo y aves en México.
El ordenamiento de autoridades federales, regido por protocolos de seguridad alimentaria, podría generar escasez de estos básicos alimenticios, haciendo que el pollo y el huevo sean más caros y difíciles de encontrar en algunas zonas del país.
Este caso de influenza aviar es el último de los que se han reportado desde junio de 2022, pero uno de los más sonados por el sacrificio de casi 296 mil pollos en dos fincas en el Valle del Yaqui, cerca de Ciudad Obregón, Sonora, y en una de Montemorelos, Nuevo León; la medida fue previsoria, ya que no todos los animales estaban infectados.
“Debido a los hallazgos en las UPA comerciales, el Senasica ordenó una cuarentena interna en ambos estados, lo que significa que las granjas ubicadas en Sonora y Nuevo León no pueden mover productos avícolas que no cuenten con un permiso de la autoridad sanitaria federal”.
“Con el objetivo de evitar la propagación de la enfermedad y proteger el consumo nacional de productos avícolas, previo al traslado de dichos productos, las UPA deberán demostrar, mediante pruebas realizadas en laboratorios oficiales, que los productos están libres de gripe aviar”, anunció el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica).
No obstante, aunque este suceso encendió las alertas de la industria, al encontrar limitantes para que las granjas avícolas de Sonora y Nuevo León hagan negocios hasta nuevo aviso, así como prever encarecimiento de productos en un marco inflacionario, el Gobierno federal minimizó la problemática.
“No, no tenemos problemas. No es un asunto grave”, dijo el Presidente Andrés Manuel López Obrador en una reciente conferencia “mañanera” al preguntársele qué medidas se tomarán para ayudar a los esfuerzos que hoy realiza el Senasica y el Dispositivo Nacional de Emergencia de Sanidad Animal (Dinesa) para proteger la producción de pollo y huevo de la enfermedad aviar de alta patogenicidad (IAAP).
La gripe aviar en México
La gripe aviar es una propagación que se da, principalmente, tanto en aves silvestres como en aves de granja y termina en el sacrificio de grandes grupos de aves.
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) señala a la gripe aviar como una infección de “baja patogenicidad” o “altamente patógena”, lo que quiere decir que puede causar desde un malestar leve en las aves hasta el virus de la influenza aviar de los subtipos (H5 y H7) del tipo A, que provocan gravedad y propagación rápidamente.
Algunas de las cepas más fuertes pueden llegar a infectar a seres humanos, sobre todo cuando principal factor de contagio es la ingesta y el contacto directo o indirecto con animales infectados, además de ambientes y superficies contaminadas por heces. Esta es la razón por la que la inocuidad alimentaria pone su lupa principalmente en las granjas comerciales, pues aunque no s un caso de gripe aviar común, muchos expertos afirman que el contagio humano se trata de una amenaza mayor que impacta por dos frentes: en el sector salud y el sector económico.
En México, por ejemplo, Sonora y Nuevo León no son los únicos estados donde se ha identificado la gripe aviar, en los últimos cinco meses el Senasica ha detectado la enfermedad en aves de siete estados, incluida una granja de pollos familiar en Chiapas y en grupos silvestres de Baja California, Estado de México, Aguascalientes y Jalisco.
Esto, previsiblemente, después de que la gripe aviar desatara alertas en Estados Unidos y Canadá en junio, activando protocolos de emergencia de salud animal.
El impacto en la industria
Los casos de influenza aviar pueden generar estragos económicos para el sector avícola, pues la muerte de aves de corral impacta directamente en las negociaciones comerciales del mundo.
Estados Unidos, por ejemplo, junto con otros exportadores como Brasil, es considerado uno de los mayores productores de pollo y carne; sólo en 2020 logró producir 20 millones 239 mil toneladas de pollo, por encima de las 14.6 millones de China y las 13.9 millones de Brasil, según el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA).
Y aunque México no se halla entre estos primeros puestos, también es significativa su posición, a la par de otros países como India, Turquía, Tailandia, Argentina y Malasia. De hecho, los tres principales productores de pollo representan al 53,3 por ciento de la producción total de pollo en Estados Unidos.
Para entender la magnitud del problema suscitado recientemente en Sonora y Nuevo León, recordemos que el país atraviesa por un ciclo inflacionario que apenas en agosto, cuando los productos de la canasta básica se elevaron a cifras récord en 20 años, el precio promedio del pollo se encontraba entre los $72 y $100 el kilo, mientras que el huevo llegó a costar entre los 25 y 50 pesos entre enero y octubre de este año
Ahora, con la cuarentena interna en dos de los proveedores y vendedores más grandes del país, detrás de Michoacán, restaurantes y rosticerías han advertido que podría haber una grave escasez de pollo y huevos en las próximas semanas, lo que generará un encarecimiento precipitado.
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