Todos los días nos exponemos a la publicidad exterior, basta asomarse a la calle para ver un anuncio de alguna marca o propaganda gubernamental. Para muchos anunciantes es el medio adecuado pero la sobresaturación del espacio público con anuncios publicitarios también es un problema.
Por Oswaldo Olivas y Jazmín Garibay.
Este año se invertirán más de 34 mil millones de dólares en publicidad exterior a nivel mundial y más de 4 mil millones de pesos se invirtieron el año pasado en la República Mexicana, según datos de Statista y el Departamento de Investigación de Merca2.0.
En México, la publicidad exterior está en el séptimo lugar de las inversiones, detrás de la televisión, internet, radio, revistas y periódicos. Pese a que no se lleva las cantidades más grandes, se utiliza en campañas específicas de acuerdo con las necesidades de la marca.
Patricia Martínez, general manager de OMD México, comenta que “la publicidad exterior sí tiene un rol relevante para las marcas y es una forma relativamente económica en la mente del consumidor. Pero la desventaja que tiene es que es sectorizada. Tiene un rol específico”.
Los anuncios exteriores han sido clave en lanzamientos y campañas publicitarias de las grandes marcas. Alejandro Campos, director de comunicación de Corona, indica que exterior está en los planes de la marca, pero no sólo con el producto sino con contenido con sustancia. “Exteriores funcionan mucho para las innovaciones”, comenta.