En los últimos años, el mundo ha visto un aumento notable en el número de millonarios, fenómeno que refleja las dinámicas cambiantes de la economía global. Diversos factores han contribuido a este crecimiento.
De hecho, las perspectivas futuras indican que esta tendencia de crecimiento en el número de millonarios continuará, impulsada por la innovación tecnológica, la globalización y el desarrollo continuo de mercados emergentes. Sin embargo, es importante considerar los posibles riesgos, como la inflación y la volatilidad del mercado, que podrían afectar negativamente la creación de riqueza en el futuro.
Bajo ese contexto, el reciente informe del banco suizo UBS destaca un fenómeno significativo en la economía global: el continuo aumento del número de millonarios en dólares. Este crecimiento se mantiene a pesar de las fluctuaciones en la distribución de la riqueza mundial y se espera que siga su tendencia alcista en la mayoría de los países en los próximos años. De las 56 naciones evaluadas por UBS, se prevé que 52 verán un incremento en su número de millonarios para 2028, mientras que los Países Bajos y el Reino Unido serán las principales excepciones a esta tendencia.
Como dato curioso, en el 2000, había 14,7 millones de millonarios a nivel mundial. Hoy en día, esta cifra ha alcanzado cerca de 60 millones, lo que representa un incremento del 300% en dos décadas.
Sin embargo, este aumento en el número de millonarios contrasta con los avances en la lucha contra la pobreza extrema. A principios del siglo, 1.700 millones de personas vivían con menos de 2,15 dólares al día. Actualmente, esta cifra se ha reducido a cerca de 700 millones, lo que representa un descenso del 60%. Aunque es un avance significativo, la reducción de la pobreza extrema no ha sido tan acelerada como el aumento de la riqueza entre los más acomodados.
Precisamente, Estados Unidos sigue siendo el país con mayor número de millonarios, con 22 millones en 2023, lo que representa el 6,6% de su población. China se ubica en segundo lugar con 6 millones de millonarios, que constituyen el 0,4% de su población. Francia, con 2,9 millones de millonarios, ocupa el tercer puesto, representando el 4,2% de su población.
Es así que a medida que ciertas economías continúan prosperando, es probable que esta expansión de la riqueza persista. No obstante, el desafío de reducir la pobreza extrema de manera más efectiva sigue siendo una prioridad global, subrayando la necesidad de políticas económicas y sociales que aborden esta disparidad creciente.